CÁDIZ (EFE).– El rey Juan Carlos y el presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy, consideran que ha llegado el momento de que toda la comunidad internacional reconozca el protagonismo económico que se ha ganado América Latina y de poner como ejemplo su éxito para superar crisis como la que ahora sufre Europa.
Ese fue el mensaje que dieron en sus intervenciones en la sesión inaugural de la XXII Cumbre Iberoamericana de Cádiz, previa a la cena de los jefes de Estado y de Gobierno, en la que el rey anunció que la próxima semana suspenderá su actividad para someterse a una nueva operación en la cadera izquierda, que tiene bastante maltrecha.
El lema de la cumbre es “Una relación renovada” y, en esa línea, el monarca explicó que ha retrasado su operación para estar presente en Cádiz e instó a profundizar la cooperación entre los países iberoamericanos y hacerse oír en el mundo con una sola voz.
Rajoy, en su alocución en el acto inaugural, consideró que ha nacido una nueva América Latina, “pilar fundamental del mundo occidental” y puente entre el Atlántico y el Pacífico.
“Más América Latina en Europa y en España es una receta imbatible para afrontar los actuales desafíos”, recalcó el presidente del Gobierno, quien hizo una cerrada defensa de la utilidad de las cumbres iberoamericanas.
Tanto el rey como Rajoy se refirieron a Cádiz y a la Constitución que nació en esta ciudad para ponerlas como ejemplo de trabajo común ante las dificultades.
DATOS
- El presidente boliviano Evo Morales jugó fútbol en Cádiz, pero canceló su reunión con el presidente Rajoy.
- Entre los presidentes ausentes figuran los de Uruguay, Argentina, Venezuela, Cuba y Paraguay.
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