Luego de que la hija del fallecido actor Paul Walker presentara una demanda contra la empresa Porsche tras atribuirle al vehículo en el que murió su padre defectos de diseño, la compañía aclaró el último lunes que el accidente se produjo por una “conducción temeraria”.
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Meadow Rain Walker, de 16 años de edad, hija única de Paul Walker, presentó la demanda ante un tribunal de Los Ángeles (California, Estados Unidos), en el que reclama que el deportivo carecía de “las características de seguridad propias de los vehículos de carreras bien diseñados o, incluso, de otros vehículos de Porsche más económicos”.
La compañía automovilística no dudó en pronunciarse y mediante su representante, Calvin Kim, lamentó la muerte del actor que se hizo famoso por las películas de la saga de acción Rápidos y furiosos, y destacó que “confía” en los informes de las autoridades. Así lo informó la agencia EFE.
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“Como hemos dicho anteriormente, nos entristece cuando cualquier persona sufre daños en un vehículo Porsche, pero creemos que los informes de las autoridades en este caso establecieron claramente que este trágico accidente se produjo por conducción temeraria y una velocidad excesiva”, indicó Calvin Kim, portavoz del fabricante.
Como se recuerda, Paul Walker falleció el 30 de noviembre de 2013 a los 40 años en Valencia (California) cuando el deportivo Porsche Carrera GT en el que iba de pasajero con el automovilista profesional Roger Rodas, de 38 años, se estrelló contra una farola y se incendió.
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