La religión musulmana prohíbe la cerveza, incluso bañarse en ella. Precisamente esto fue lo que ocurrió con Franck Ribéry, quien profesa dicha religión, durante las celebraciones del título de Bundesliga del Bayern Múnich, quien fue bañado con esta bebida por su compañero Jerome Boateng.
Ribéry trató de evitar que esto ocurra, corrió como si estuviera en pleno partido de Champions, pero Boateng lo persiguió y le vació todo el inmenso vaso de cerveza. “No voy a volver a hablar con Boateng, él sabe que soy musulmán”, declaró después de los festejos, según elmundo.es.
Se detalló que el delantero francés no es musulmán de nacimiento pero jugó por el Galatasaray turco en el 2005. Amigos cercanos aseguran que se convirtió al Islam tras casarse con su esposa de origen marroquí.
“El Islam es mi fuente de fortaleza ya sea dentro o fuera del campo de juego”, afirmó Ribéry a la revista Paris Match.
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