DPA (Natal)
El defensa Diego Lugano, capitán de la selección uruguaya de fútbol, negó hoy que su compañero Luis Suárez mordiera a Giorgio Chiellini y calificó al jugador italiano de “tremendo alcahuete, mala persona y llorón”.
“Las imágenes no muestran nada, fue un forcejeo. Vimos la foto de Chiellini. ¿Cómo se llama? ¿Chielllini?”, dijo sobre la imagen en la que el defensa mostraba el árbitro las marcas de los dientes de Suárez durante el partido en el que Uruguay ganó por 1-0 y avanzó a octavos de final del Mundial de Brasil.
“Y son cicatrices viejas, se da cuenta cualquier estúpido, hay que ser muy estúpido para no darse cuenta de que esas cicatrices son viejas”, dijo Lugano, de 34 años y que no jugó hoy por lesión.
“Italia, fiel a su historia, estuvo todo el tiempo pegando, haciendo tiempo, con la mañana de siempre, hace parte del juego y lo respetamos. Pero si Chiellini salió del partido acusando a Suárez, no se lo vamos a respetar”, agregó.
“Si salió llorando y alcahueteando así del campo de un compañero de trabajo, como hombre no alcanza los puntos que tiene como jugador. Si lo dijo, es tremendo alcahuete, mala gente y llorón”, refirió.
La FIFA anunció que estudiará la acción, que podría provocar una suspensión de Suárez, quien ya fue sancionado por algo similar en la liga inglesa de fútbol. El árbitro del encuentro, el mexicano Marco Rodríguez, no señaló nada, lo que provocó la protesta del zaguero italiano.
“Si Chiellini dijo eso después del partido, terminó con todos los códigos del vestuario, de futbolista. Nunca lo imaginé de un italiano. Sería más de un hombre asimilar la derrota y asumir los errores propios”, afirmó Lugano.
“No hay mordisco, no hay cicatriz, es un forcejeo en el juego, están muy preocupados ustedes con eso”, dijo a los periodistas que le preguntaron por la acción.
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