Carlos Lara Porras
clara@peru21.com
Diez años atrás, al pie del Misti, Cienciano alcanzó la gloria al vencer a River Plate por 1-0 y alcanzar la Copa Sudamericana. El héroe de aquella hazaña fue el zaguero paraguayo Carlos Lugo al anotar el gol del triunfo de un violento tiro libre. Diez años después en Asunción, aquel guerrero guaraní con corazón inca, rememora aquella gesta.
¿Qué sentimiento te embarga al recordar esa fecha?
Cada vez que llega esta fecha me emociona y me pongo contento porque tuve el privilegio de formar parte de un club que hizo historia.
¿Qué recuerdas de ese gol tuyo que pasó a la historia?
Era uno de los encargados de cobrar los tiros libres. Y en ese momento pedí patear porque me tuve mucha confianza y le pegué al medio porque sabía que la barrera se iba abrir y así sucedió. Ese gol marcó mi vida y fue histórico para Cienciano y para el Perú porque era la primera vez que un club peruano lograba un título internacional.
¿Qué imagen te queda de aquella noche?
El partido fue difícil, River nos complicó por momentos y el árbitro se parcializó con ellos. Pese a ello el equipo nunca aflojó y lo más emotivo fue cuando antes de cobrar el tiro libre todo el estadio comenzó a gritar “¡Sí se puede!”, eso fue una motivación extra.
¿Soñaste con anotar el gol del triunfo en la previa?
La verdad nunca pensé, ni soñé en anotar el gol del triunfo, pero si tenía confianza que ganábamos el partido. Tanto así que estaba preparado para celebrar al final del partido, por eso me puse debajo de la camiseta un polo que decía ‘Perú’ que me lo regaló un amigo que era utilero de la selección. Y como se dio el gol al momento de la celebración me embargó la emoción y lo mostré.
¿Qué tan importante crees que fue el aspecto motivacional al que apeló el entrenador Freddy Ternero con el plantel?
Eso de las frases de motivación a la que apeló Freddy para algunos les habrá resultado efecto, pero para mí no porque yo tenía confianza en lo que podía rendir y tenía mucha fe en Dios.
¿Alguna anécdota de aquel partido?
El representante de la Conmebol pensó que era el capitán y me dio el trofeo de la Copa Sudamericana, cuando debía dárselo a Óscar Ibáñez por ser el capitán. Otra anécdota fue que fui sorteado para el control antidoping y como me demoré me dejó el bus, felizmente la policía me llevó en un patrullero al hotel.
¿Y aún conservas la camiseta con la que jugaste ese partido?
Sí, ahí lo tengo bien guardado. Recuerdo que al regresar a Paraguay de vacaciones, luego de ganar la Sudamericana, sabía que los familiares y amigos iban a querer que le regale mi camiseta, por eso mandé hacer como 100 camisetas con mi dorsal para obsequiarlos.
APENADO POR CCAHUANTICO Y JULIO GARCÍA
¿Qué sientes ver a César Ccahuantico, que es como tu hermano, en la cárcel?
Me pongo triste con lo que le pasa al ‘Cholo’ Ccahuantico que es como mi hermano. Él ya lleva más de tres años encerrado. Estar recluido en una cárcel, privado de la libertad y lejos de su familia es triste. El ‘Cholito’ tiene que ser fuerte, que tenga fe en Dios, pues pronto saldrá libre.
¿Y de lo que le pasó a Julio García?
Me apenó mucho el accidente que sufrió Julio porque se trata de una buena persona. A la distancia le digo a Julio que tenga fe en Dios y que con mucho esfuerzo y voluntad va salir adelante de este duro momento que pasa.
¿Qué te genera ver hoy a Cienciano, luego de ganar la Sudamericana y la Recopa, pase hoy muchas carencias y luche por no descender?
Es una pena. Con Martín García, quien también formó parte de ese plantel histórico, me comentaba de los malos manejos que hubo en los últimos años. Lo que pasa es que algunos dirigentes solo buscan sacar provecho personal en perjuicio del club. Si me preguntan de Juvenal Silva, diría que me dio la oportunidad de llegar a Cienciano y se portó bien conmigo.
Pocos saben que antes de Cienciamo estuviste en un Juan Aurich con muchas limitaciones y bajo la dirección de Jorge Sampaoli.
Así es. Antes de venir al Juan Aurich jugaba en All Boys de Argentina y me hicieron la propuesta para jugar al Perú, me dijeron que era un club grande. Al llegar al aeropuerto me dieron mi pasaje para ir a Chiclayo y al llegar allá, fue duro porque la realidad era otra, pues el club tenía muchas limitaciones y problemas económicos. Coincidentemente esa fue la primera experiencia como técnico de Sampaoli.
¿Qué recuerdas de Sampaoli, notabas cierta proyección con lo que es hoy, un triunfador que ha clasificado a Chile al Mundial?
Su trabajo era muy bueno, lamentablemente algunos jugadores no entendían su metodología. Recuerdo que nos decía que había que luchar duro para lograr el éxito. Y mira lo que es hoy, triunfó en Chile y va dirigir la selección en el Mundial.
¿Cuál es tu presente hoy?
Estuve jugando en la regional del fútbol paraguayo, que es como la Copa Perú. Ya me retiré del fútbol, a veces colaboro con amigos que son agentes de fútbol cuando se trata de ver o sugerir a algún jugador. Voy a estudiar para entrenador y algún día me gustaría dirigir a Cienciano.
Si te interesó lo que acabas de leer, recuerda que puedes seguir nuestras últimas publicaciones por Facebook, Twitter y puedes suscribirte aquí a nuestro newsletter.