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‘Tacacho’: El hombre que pasa su vida sobre los escenarios de rock

Empezó con Frágil a los 16 años, pasó por los mejores momentos de Los Nosequien y los Nosecuantos y hoy trabaja con Bareto.

Empezó con Frágil, pasó por los mejores momentos de Los Nosequien y los Nosecuantos y hoy trabaja con Bareto. (Mario Zapata)
Empezó con Frágil, pasó por los mejores momentos de Los Nosequien y los Nosecuantos y hoy trabaja con Bareto. (Mario Zapata)

Es el primero en llegar y el último en irse. Trabaja mientras todos se divierten. Vestido de negro sobre el escenario, está vigilante ante cualquier imprevisto o requerimiento de los músicos. Tiene que cargar instrumentos, instalarlos, desinstalarlos, cablear, saber de electricidad, conocer un poco de cada instrumento, poseer conocimientos de sonido e, incluso en algunos casos, ser seguridad del grupo. Todo terreno.

Víctor Quispez Arredondo, el popular ‘Tacacho’, es desde hace 24 años técnico o stage manager de grupos de música, principalmente rock.

“El jueves de la semana pasada me fui de gira con Raúl Romero a los Estados Unidos, y he llegado este lunes a las 12 de la noche. Me acosté a las 2 a.m. y a las 6 a.m. ya estaba despierto para llegar a las 9 de la mañana para trabajar en otro evento, que acabó en la madrugada. Ayer tuve otro concierto y hoy tengo Bareto y el sábado también. Mi esposa y mis hijos ya se acostumbraron”, nos cuenta ‘Tacacho’ sobre su agitada agenda a sus 39 años.

CONCIERTO DEBUT
Tenía 16 años y vivía a la espalda de la casa de Tavo Castillo, de los míticos Frágil, en Breña. Víctor era amigo de los hijos del buen Tavo. De pronto, un día los creadores de Av. Larco le propusieron ir a un concierto a ayudar a cargar los instrumentos. Aceptó y empezó su historia.

“Casi todos los días iba a la casa de Tavo, entraba a la sala de ensayo, le preguntaba cómo se armaban las cosas y yo apuntaba. Luego desarmaba toda la sala y la volvía a armar. Y así hasta aprender”, asegura Quispez.

*LAS GIRAS *
Una vez sobre los escenarios, ‘Tacacho’ no paró. Hasta que un día entró una llamada a la casa de Tavo. Era el productor de Los Nosequien y Los Nosecuantos preguntando por él. Le propuso trabajo.

“Yo no he faltado a un concierto de Nosequien en 20 años”, relata con orgullo. Y la suerte estuvo de su lado. “Un día en un festival en Miami, tocamos varias bandas extranjeras. Yo había pedido una guitarra de ‘back’ para no llevar tanto equipo de Lima. Pero la producción no la había conseguido. El cantante del reconocido grupo panameño Los Rabanes, Emilio Regueira, escuchó que tenía ese problema y me prestó su guitarra”, agrega.

Víctor Quispez hoy también trabaja con los exitosos Bareto, con los que ha llegado hasta Japón. Y en su agenda ya tiene fechas separadas con Raúl Romero para volver a EE.UU. en los próximos meses. “Vivo de esto y toda mi vida he vivido de esto. No he necesitado trabajar en otra cosa, porque me he dedicado exclusivamente. Y vivo bien. Viajo, tengo mi familia, tengo todo”. ‘Tacacho’ es un hit.

Por Mijail Palacios Yábar
@mijailpy


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