Un niño de ocho años salvó de morir ahogado luego de caer a un canal de regadío y ser arrastrado por la corriente. El hecho ocurrió en el cruce de las avenidas Chancas y Encalada en Santa Anita cuando el pequeño intentó cruzar la pista y un auto lo asustó.
Para su suerte, un vecino arriesgo su vida y se metió por el túnel de 50 metros hacia para rescatarlo.
“Nadie se apersonaba a rescatarlo. La gente se amontonaba y como yo tuve un hermano que falleció en esa acequia, sin pensarlo me metí”, afirmó Rolando Quispe, quien terminó como el héroe de la jornada.
El menor se recupera favorablemente, pero los vecinos de la cuadra siete del jirón Chancas denunciaron que el hueco no tenía una tapa segura. De hecho, se comprobó que la acequia estaba tapada con una endeble madera que evidentemente cedió ante el peso del niño.
Hasta el momento, ningún representante de la municipalidad distrital se acercó al lugar para cerrar el agujero y así evitar otra tragedia.
Si te interesó lo que acabas de leer, recuerda que puedes seguir nuestras últimas publicaciones por Facebook, Twitter y puedes suscribirte aquí a nuestro newsletter.