Alejandro Mendiguetti, representante legal de la embotelladora Demesa S.A., calificó como una “medida radical” la resolución de la Dirección General de Salud Ambiental (Digesa) de cancelar sus registros sanitarios y disponer el retiro del mercado de varios de sus productos al no estar aptos para el consumo humano.
En declaraciones a RPP, el asesor de la mencionada compañía indicó que la entidad del Ministerio de Salud también determinó el cierre definitivo de sus instalaciones y una multa pecuniaria –cuyo monto no especificó– tras analizar solo “dos bidones” instalados en la dirección de administración de la Presidencia del Consejo de Ministros y en la propia Digesa.
“Cuando el bidón sale de nuestra planta y pasa al distribuidor, se acabó la responsabilidad porque el bidón es, lamentablemente, de material permeable”, señaló Mendiguetti Costa, quien indicó que esta propiedad hace que el agua adquiera el olor de cualquier sustancia que se coloque a su lado.
Consultado sobre la presencia de hongos, bacterias y larvas en sus productos, el representante de Demesa recalcó que el agua que adquieren de la red pública viene contaminada “hasta cierto punto” y que la tratan en seis etapas de filtración antes de comercializarla. “El agua también tiene una fecha de caducidad. Si es que está en botella PET, es de 90 días”, añadió.
De otro lado, Mendiguetti Costa señaló que el laboratorio de Digesa no cuenta con certificación e indicaron que pedirán que los vuelvan a examinar “con objetividad y con criterio” antes de entablar una demanda.
Si te interesó lo que acabas de leer, recuerda que puedes seguir nuestras últimas publicaciones por Facebook, Twitter y puedes suscribirte aquí a nuestro newsletter.