A poco de que se dicte la sentencia que pondrá punto final al largo y mediático juicio por el asesinato de la empresaria Myriam Fefer, su hijo Ariel Bracamonte mostró una vez más su preocupación por la decisión final que puedan adoptar de los jueces que ven el caso.
“Tengo temor de que la sala se deje manipular por los medios y que este asesino sea condenado por homicidio simple por ser un simple ladrón, cuando todos sabemos que no es así”, dijo a Reporte Semanal.
Y es que, según Ariel, la reciente aparición de Alba Rojas Puerta, suegra del asesino confeso de la empresaria, podría beneficiar tanto a Ospina como a su hermana Eva Bracamonte y a la expareja de esta, Liliana Castro Manarelli, procesadas como autoras intelectuales del crimen
“Cuál será el interés… beneficiar a los tres procesados por este caso y hacer que la idea que es un simple ladrón cobre más fuerza”, dijo.
Hace una semana, Rojas Puerta firmó una declaración jurada en la que aseguraba que era pariente de Trujillo Ospina y que no había delatado a su yerno ante la Policía argentina, según registraron las cámaras de Cuarto Poder.
“Para nadie es un secreto que él (Trujillo Ospina) sí mató a Myriam Fefer, pero él dice: ‘a esas dos viejas (Eva y Liliana) yo no las conozco’”, dijo la mujer desde Colombia.
La defensa legal de Ospina sostiene que él no es un sicario, sino que simplemente entró a la casa de la empresaria para robar pero que la situación “se le salió de las manos”.
En caso este argumento sea aceptado por los jueces encargados del caso, Eva Bracamonte no sería una parricida ni Liliana Castro la coautora del delito, por lo que serían declaradas inocentes.
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