“Hola, quiero hacer una consulta. ¿Las pastillas para agrandar el pene funcionan de verdad o son pura falsedad?”, nos inquiere José Manuel desde Lima. Una consulta más entre muchas otras que demuestran que esa sigue siendo la principal preocupación de demasiados hombres: el tamaño de su miembro viril y cómo poder llegar a estar mejor dotado.
Sinceramente, el tamaño de mi pene tampoco es nada del otro mundo, pero, a no ser que se trate realmente de uno de escasa longitud (que mida menos de 8 cm en erección), yo diría que es mejor buscar la complicidad de tu compañera y explorar hasta optimizar cómo proporcionar placer (y recibirlo). Ambos quedarán encantados sin necesidad de cintas métricas. Cada persona tiene sus propios resortes sensuales.
[¿Cuánto debe medir el pene promedio?]
No está demostrado que haya algún método realmente efectivo en cuestión de pastillas, artilugios y ejercicios de estiramiento, más allá del paso por el quirófano (la faloplastia de aumento), que puede dejar cicatrices… y a saber cómo es irrigada más tarde esa área a la hora de practicar el sexo. Yo no arriesgaría nuestro querido ‘miniyó’ en busca de un ideal que muchas veces solo existe debido a los complejos que todos albergamos.
Las pastillas con hormonas suelen ser una estafa y las bombas de vacío pueden causar daño vascular, desgarro o disfunción eréctil. Tal y como el aumento quirúrgico de senos no conlleva una mayor sensibilidad en ellos, ¡alargar el pene tampoco garantiza mayor potencia sexual!
[Trasplantes de penes desarrollados en laboratorio podrían hacerse realidad]
DATOS
- El jelqing es una técnica árabe de masaje para alargar el pene: estimula el riego sanguíneo a modo de ordeño. Sería más popular si se acreditara su invención a los habitantes del Congo, los más dotados del mundo.
- Si te centras en los prolegómenos sexuales con tu pareja (caricias de zonas erógenas, sexo oral, uso de vibradores) y la llevas al clímax antes de la penetración, gozará del coito con un pene grande o pequeño.
- Los especialistas recomiendan la posición del ‘perrito’ para que ella te sienta lo máximo posible. Variantes de costado también sirven: sobre todo, al permitir la estimulación manual del clítoris durante el acto.
Por: Hernán Migoya (sexo21@peru21.com)
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