“Mi prioridad es mi trabajo”, le respondió Malena a su enamorado cuando este le reclamó por qué no le dedicaba mucho tiempo. Poco después la relación terminó y, ahora, ella se siente sola y le gustaría compartir buenos momentos con un ser amado.
La carga laboral no le permite asistir a las reuniones que organizan sus amigos. Incluso, cuando sus colegas le ofrecen salir, ella desiste porque se siente “cansada”.
Malena tuvo una mala experiencia con una relación anterior. Luego de terminar un romance de varios años, decidió aferrarse a su profesión. No salía con amigos, no los visitaba ni hablaba constantemente con ellos. Incluso había perdido la confianza para confesar sus sentimientos a los demás.
¿QUÉ HACER?
La especialista Janet Oliveros afirma que una persona que dice que no tiene tiempo para el amor se está autoengañando. “Se trata de una elección personal que debe ser evaluada por sus ventajas y desventajas. Se pueden dar muchas cosas al mismo tiempo sin necesidad de descuidar la realización profesional”, señala.
Asegura que las malas experiencias pueden ocasionar que una persona se cierre al amor. “No quiere sentirse nuevamente lastimada y utiliza este mecanismo de defensa como un recurso para protegerse de un nuevo fracaso”, sostiene.
¿Qué hacer? En su opinión, se debe empezar por la sinceridad. “Es básico plantearse prioridades y darle a cada cosa un lugar y un tiempo importante para sentirse querida y satisfecha”, indica.
Afirma que una mujer, por ejemplo, puede sentirse rechazada por su alto nivel profesional.
“Puede llegar a intimidar a una posible pareja, sobre todo si el hombre no tiene sus objetivos claros y si se maneja con inseguridades. Al final, la mujer tendrá la oportunidad de elegir estar acompañada o sola”, refiere. Todo depende del grado de compromiso que haya en una relación.
La experta recomienda que una persona no se cierre en ideas negativas sobre la falta de amor. “El iniciar una relación a pesar de los miedos y temores que existan representa un riesgo que puede ser asumido”, dice.
Finalmente, señala: “Hay que darse permiso de ser feliz y de que su realización profesional, laboral y económica vaya de la mano con la satisfacción a nivel afectivo para consolidar una relación”.
DATOS
- Puedes conversar con amigos sobre tus verdaderos sentimientos. ¿Necesitas a alguien especial? Debes preguntarte esto y responderte con sinceridad.
- Si la soledad te deprime, podrías evaluar recibir una terapia. Antes debes aceptar que, en el fondo, sí te gustaría iniciar una relación amorosa.
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