La presidenta del Congreso, Ana María Solórzano, justificó hoy su presencia en una marcha contra el proyecto minero Tía María, en marzo de 2011, señalando que entonces se había difundido el informe de impacto ambiental de UNOPS (entidad de las Naciones Unidas) que presentó varias observaciones.
“La posición del pueblo arequipeño de marzo de 2011, en la foto en la que yo aparezco públicamente era mostrar la preocupación, en ese entonces, por el informe de UNOPS que presentaba 138 observaciones y 300 recomendaciones al proyecto”, puntualizó.
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Solórzano se definió como una “mujer demócrata” que siempre ha considerado que este problema debe resolverse por la vía del diálogo.
“Las protestas son legítimas y dentro del marco constitucional, pero obviamente tienen que ser pacíficas. Mi posición no ha cambiado en ese sentido. No más muertes”, enfatizó.
En declaraciones formuladas en el Parlamento, Solórzano señaló que ningún derecho a la protesta se realiza con amenazas ni violencias.
En ese sentido, pidió a los protestantes en su natal Arequipa que piensen en “los niños que quieren ir a la escuela y en las madres que quieren ir al mercado”.
Por ello, condenó que se haya apedreado las casas de las personas que no se sumaron a las protestas.
Finalmente, Solórzano respaldó los esfuerzos de la gobernadora regional, Yamila Osorio, de promover el diálogo y dijo que la detención del dirigente Pepe Julio Gutiérrez, comprometido en un audio donde pide dinero para resolver la crisis, dependerá del Ministerio Público.
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