Ahora que postulará a la alcaldía de Lima, ¿cómo hará para que la gente deje de vincularlo con el Partido Aprista?
Mi renuncia al partido fue una señal directa de no estar de acuerdo con cómo se manejaban las cosas ahí. Intenté desde adentro hacer cambios, y es claro que me hicieron y me pusieron las cosas difíciles al interior.
También tiene que desvincularse de los actos de corrupción de su época de ministro de Transportes.
Yo estoy dispuesto a colaborar en lo que sea, pero sí considero que he sido una víctima de la corrupción y por eso soy el más interesado en aclarar los temas. Todo lo que se ha dicho de mí son especulaciones que, en su mayoría, salieron de mi ex partido.
El congresista Javier Velásquez Quesquén ha ironizado sobre su partido preguntándose si se llamaría Odebrecht.
Viniendo de quien viene, es obvio cuál es la intención. Por eso, ellos representan la manera tradicional de hacer política, es decir, metiendo cabe, dando adjetivos, y eso ya aburre. Mi movimiento es Contigo Ciudadano y no vamos a pelear con nadie.
¿En qué se diferenciarán de otros partidos o movimientos políticos?
Haremos una campaña con mucha transparencia y evitaremos rodearnos de gente desleal. Ahora esperamos juntar las firmas para postular a la alcaldía de Lima en 2018.
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