La Asamblea Nacional de Rectores (ANR) confirmó que la Universidad Inca Garcilaso de la Vega se maneja de forma irregular, según un informe de la comisión conformada para investigar las denuncias que pesan sobre el rector Luis Cervantes Liñán.
En el documento, al que tuvo acceso El Comercio, la ANR indicó que si bien la Ley 23733 señala que –al tratarse de una universidad privada– el dinero excedente de un ejercicio presupuestal anual debe reinvertirse en beneficio de la misma, en la Garcilaso se reparte el dinero a los trabajadores bajo los llamados “bonos de producción”.
Como se recuerda, Perú21 reveló en marzo del año pasado que Cervantes Liñán percibía anualmente más de S/.30 millones, mientras que personas cercanas a él, como su hijo o ciertos decanos, al año ganan entre S/.992 mil y S/.10 millones.
[Rector de la Universidad Garcilaso gana S/.2 millones al mes]
CARRERAS EN TIEMPO RÉCORD
Otra de las conclusiones a las que llega la ANR es que, contrario a las leyes universitarias, en la Garcilaso se imparten carreras en tiempos reducidos, además de dictar maestrías sin plan curricular ni sustento técnico. Ambas faltas, según recoge El Comercio, “estarían atentando contra la formación profesional del estudiante de postgrado”.
Incluso, la ANR se pronunció sobre el grado de Bachiller en Derecho y el título de abogado que obtuvo en 2011 el alcalde de San Juan de Lurigancho, Carlos Burgos, e indicó que el burgomaestre no acreditó haber terminado la secundaria y que no se encuentran en la universidad los certificados que habría presentado para ser considerado como estudiante.
NO QUISO RESPONDER
Durante su presentación ante la Comisión de Educación del Congreso y pese a las serias denuncias que pesan contra él, el rector Luis Cervantes Liñán decidió mantener silencio y no respondió sobre la “planilla dorada” de trabajadores dentro de la casa de estudios ni sobre su propio sueldo, argumentando que el caso ya estaba judicializado y que el mismo Poder Judicial le había prohibido hablar del tema.
Asimismo, indicó que los exorbitantes sueldos que reciben algunos trabajadores responden al nivel de formación de los mismos y se pagan bajo el amparo de la autonomía de la universidad.
Si te interesó lo que acabas de leer, recuerda que puedes seguir nuestras últimas publicaciones por Facebook, Twitter y puedes suscribirte aquí a nuestro newsletter.