La congresista nacionalista Cenaida Uribe presentó esta mañana unos mensajes de texto que –a su juicio– prueban que su colega Cecilia Tait está empeñada en no dejarla trabajar, al punto de haber asignado específicamente a una de sus asesoras la tarea de ubicar en qué colegios de Lima hay paneles publicitarios de la empresa Punto Visual para intentar perjudicarla.
En los mensajes, Tait y su colaboradora Sara Miranda discuten sobre los colegios en los que se ubican los anuncios de la referida empresa, a favor de la cual Uribe habría ejercido presión en el colegio Alfonso Ugarte para la renovación de un contrato por los paneles. Por ello, la nacionalista fue investigada en la Comisión de Ética, aunque el caso quedó archivado a través de un escandaloso blindaje.
Lo que no explicó Uribe es cómo tuvo acceso a los mensajes de WhatsApp (servicio gratuito de mensajería para celulares) almacenados en los teléfonos de la congresista de Unión Regional y de Miranda. En una entrevista que Perú21 hizo hoy a Cecilia Tait, su asesora negó haber compartido las conversaciones.
“Sí (el teléfono fue interceptado) Es un acto ilegal, estamos viendo si es una violación al secreto de las comunicaciones. Quizá es un nuevo negocio. De los paneles pasamos a la interceptación telefónica. Tal vez sea para distraer la atención, pero no me preocupa”, dijo Tait al periodista Gonzalo Pajares.
En la conversación, la legisladora respaldó a su asesora, presente durante la entrevista, y descartó que esta haya entregado los mensajes a Uribe. “Sarita trabaja conmigo hace varios años y lo que esto comprueba es que algo extraño está sucediendo: tengan cuidado, el WhatsApp no es lo más seguro”, apuntó.
Esto deja abiertas dos posibilidades: o alguien tomó el teléfono de Sara Miranda en un descuido o el equipo fue interceptado, es decir, ‘hackeado’. La primera alternativa es hasta ahora la más probable, pues Cenaida Uribe mostró en sus imágenes un teléfono que era cogido por una tercera persona. Luego explicó a Perú21 que se trataba de su propia mano.
“No voy soy la persona encargada de ver eso (si Uribe ordenó la supuesta interceptación), habrá quienes se encargarán de hacerlo y se pronunciarán sobre el tema legal. Una persona que ligeramente muestra unos mensajes por WhatsApp –que no niego, porque estoy haciendo mi trabajo– es peligrosa”, enfatizó.
De otro lado, Tait informó que consultará con su abogado qué acciones tomará y precisó que denunciará el caso ante la Comisión de Ética en cuanto esta se instale nuevamente. El caso Punto Visual y el blindaje a Uribe desataron el martes una crisis en este grupo de trabajo tras las renuncias de su presidente, Humberto Lay, y de otros miembros.
Perú21 intentó en al menos cuatro ocasiones comunicarse con la congresista Cenaida Uribe para recoger su descargo, pero no obtuvo respuesta. Su asesora, Pilar Talledo, indicó que la oficialista se comunicaría con nosotros, pero no hemos recibido su llamada hasta el cierre de esta nota.
(Actualización 3:25 pm)
En comunicación telefónica con Perú21, la congresista Cenaida Uribe expresó que el celular de Tait no fue interceptado, sino que tuvo acceso a los mensajes a través de una extrabajadora del despacho de su colega –a quien solo identificó como Lupe– a la que esta “trató mal” y luego despidió.
“Ella sabe perfectamente quién es y de dónde viene (esta denuncia), que no le mienta a la gente. El celular es de una extrabajadora a la que ella maltrató y botó. Si ves, en las fotos (que presentó hoy en el Congreso) está mi mano. Es el celular de esta extrabajadora”, aseveró la nacionalista.
Uribe precisó que Sara Miranda “le prestó su teléfono celular” a Lupe y esta tomó las fotos con las conversaciones con la congresista Tait.
Si te interesó lo que acabas de leer, recuerda que puedes seguir nuestras últimas publicaciones por Facebook, Twitter y puedes suscribirte aquí a nuestro newsletter.