Carlos Rivera: “Ramos Heredia no es garantía para el caso Orellana”

El fiscal de la Nación, Carlos Ramos Heredia, dijo el domingo que en el Ministerio Público se abrieron investigaciones internas a fiscales presuntamente implicados en el caso de la red de Rodolfo Orellana. Este fue arrestado el jueves último en Colombia y, el sábado reciente, se le trasladó al penal Ancón I.

Pero Ramos Heredia no mencionó que él mismo está sometido a una indagación en el Consejo Nacional de la Magistratura (CNM). Las razones son sus sospechosas contradicciones respecto a las reuniones que habría sostenido con Orellana, cuando el primero era jefe de la Fiscalía Suprema de Control Interno.

Como es público, por ese motivo, el CNM abrió un proceso disciplinario al titular del Ministerio Público el 23 de octubre pasado tras la revelación de Perú21 sobre la versión contradictoria del fiscal supremo Carlos Ramos de su encuentro con el supuesto cabecilla de la red delictiva.

A propósito de esta situación, Carlos Rivera Paz, coordinador del área de Defensa Legal del Instituto de Defensa Legal (IDL), manifestó que Ramos Heredia no garantiza una investigación seria ni imparcial en este caso.

“La presencia del actual fiscal de la Nación, por estar al frente de la institución, no es una garantía para los procesos de investigación que se desarrollan en el Ministerio Público, pues las denuncias en su contra ante el CNM y en el Congreso recogen antecedentes e indicios graves y preocupantes”, señaló a Perú21.

Añadió que “las decisiones que Ramos Heredia ha tomado en las últimas semanas, como cabeza de la Fiscalía de la Nación, obedecen más a una motivación de defensa personal que a medidas de carácter institucional, con el fin de evitar que se complique su situación legal”.

En tal sentido, el representante de IDL aseveró que se sospecha que el titular del Ministerio Público interfiera en el curso de las investigaciones que pudieran afectarlo.

Por su parte, el ex fiscal supremo Avelino Guillén expresó que el CNM debería pronunciarse con celeridad respecto a las investigaciones abiertas a Carlos Ramos Heredia.

“Se tiene que definir esta situación con el fin de que no exista cuestionamiento a las altas autoridades del Ministerio Público, y evitar que se perjudiquen las pesquisas (en el caso Orellana)”, indicó a Perú21.

SICARIOS A DOMICILIO
En tanto, la procuradora para el Lavado de Activos, Julia Príncipe, refirió que, como parte de la estrategia de amedrentamiento en su contra por parte de la red de Orellana, un grupo de sicarios fue hasta su casa para intimidarla a ella y su familia.

“Aparte de las calumnias y el reglaje a los que fui sometida, que ejecutó el ex policía Benedicto Jiménez, hubo una visita a mi domicilio de sicarios colombianos encapuchados”, expresó en el programa Sin peros en la lengua.

Consideró que la organización de Orellana sigue operando a pesar de la detención preventiva de varios de sus integrantes y cabecillas.

Además, cuestionó a la fiscal Marita Barreto, a cargo de las indagaciones a la red por lavado de activos y asociación ilícita para delinquir, debido a que esta magistrada no habría impulsado el arresto preventivo para doce personas identificadas como presuntos integrantes de la organización criminal.

Agregó que, de las 52 personas investigadas por el Ministerio Público por sus nexos con Rodolfo Orellana, más de 40 no tienen medida restrictiva judicial alguna, es decir, transitan con total libertad.

De otro lado, el fiscal de la Nación desestimó la propuesta del ministro del Interior, Daniel Urresti, para que la fiscal Marita Barreto traslade su oficina a la sede de la Dirección Antidrogas de la Policía Nacional (Dirandro) con el fin de que reciba mayor protección policial tras la captura de Orellana.

Ramos Heredia acudirá este lunes a la comisión investigadora del caso Orellana, a la cual fue citado para que informe sobre las pesquisas fiscales al abogado y su organización delictiva.

El congresista Vicente Zeballos, titular de ese grupo de trabajo, manifestó que, con las recientes detenciones, la cúpula de la red de Rodolfo Orellana empezó a desarticularse.

La fiscal Barreto aseveró que desarrolla un trabajo profesional y que no busca solo dar expresiones mediáticas. Esto en respuesta a algunos cuestionamientos a su labor.