La Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) confirmó que, en la adquisición de la oficina de la torre Omega, a nombre de la suegra del ex presidente Alejandro Toledo, se pagó 82% más de lo que abonaron los anteriores propietarios del inmueble apenas un año atrás, según documentación oficial a la que accedió Perú21.
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En este reporte de la UIF, el último que expidió este organismo sobre el denominado caso Ecoteva –fechado el 18 de noviembre de 2014–, se presenta un cuadro comparativo con los desembolsos que se hicieron por la propiedad.
En junio de 2011, la firma Actualisap Perú compró la oficina 1703 del edificio, ubicado en Surco, por US$458,150 y, en setiembre de 2012, Eva Fernenbug adquirió ese predio a la empresa por US$832,400 con fondos de Ecoteva. Además, Fernenbug abonó 67% más por un depósito y 25% adicional por cada uno de los tres estacionamientos comprados en la misma torre.
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Como se sabe, la madre de la ex primera dama Eliane Karp compró también una mansión por US$3’750,000 en Lima.
MODALIDAD DE LAVADO
Consultado al respecto por Perú21, César Albrecht, ex jefe de Análisis de la UIF, señaló que este tipo de operación inmobiliaria configuraría una modalidad de lavado de activos. “Pagar un sobreprecio podría constituir un mecanismo de lavado, pues al lavador no le interesa perder capital con tal de legalizar sus fondos”, dijo.
Por Óscar Libón (olibon@peru21.com)
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