Fritz Du Bois,La opinión del director
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Así tenemos que ella no solo coordinaba con terroristas para obstaculizar las labores de erradicación de coca sino que conspiró con el ‘camarada José’ para eliminar al ‘camarada Artemio’ y formar un frente amplio, del Huallaga hasta el VRAE, para que ahí opere la columna mejor apertrechada que aún mantiene Sendero. Parece que aspiraba a convertirse en la líder política de ese movimiento terrorista y estaba fortaleciendo su posición intentando tener bajo su influencia a los ‘mandos’.
Más aún, si consideramos que también tenía proyectado ser candidata a presidente regional de San Martín, lo que bien pudo haber logrado con el enorme apoyo que hubiera recibido del Estado, entonces no estuvimos muy lejos de que esa región sea zona liberada para Sendero y el narcotráfico. De la que nos hemos librado.
Ahora, la pregunta que nos hacemos es: ¿Qué otros políticos del gobierno también estarían vinculados a Sendero? Para empezar, hay dos congresistas que son no solo dirigentes cocaleros sino que además son cercanos a Obregón. Lo cual de por sí ya los vuelve sospechosos y, sin duda, deben de ser investigados.
Además, están los alarmantes antecedentes de la directora de Gobierno Interior, quien ha designado como gobernadores a personajes cuestionados. ¿Cuántos de los cientos de nombramientos que ha hecho podrían ser de senderistas o de sus allegados?
En realidad, cualquier cosa es posible al haber quedado confirmado que, a través de Obregón, el terrorismo ha penetrado al partido del gobierno. Por ello es fundamental que el servicio de inteligencia –con su abultado presupuesto– nos dé tranquilidad y realice de inmediato una corrida de todos los funcionarios nombrados para asegurar que no hay más infiltrados.
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