Eduardo Ferreyros, Al.Mercado
eferreyros@peru21.com
Ambas investigaciones –curiosamente realizadas de oficio– buscarían imponer sobretasas a la importación. En el primer caso encarecería el algodón afectando la competitividad de los productores de hilados y de todos los confeccionistas. Y para ‘mantener contentos’ a los confeccionistas, Indecopi aplicaría sobretasas al ingreso de ropa china, perjudicando no solo el libre comercio, sino el derecho de los consumidores a elegir. Ambas acciones son proteccionistas y golpean la relación con nuestros dos principales socios comerciales. Por años, Perú ha utilizado medidas proteccionistas para impulsar sectores, y las consecuencias han sido desastrosas. Lo que viene es grave y no debe pasar desapercibido. Ya los dos socios comerciales están indignados. ¿No aprendemos aún?
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