Fritz Du Bois,La opinión del director
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Mientras que la efectividad con la que la Policía actuó el sábado confirma que es perfectamente factible hacer operativos de modo adecuado. Finalmente, se realizó lo que debió hacerse hace dos años.
En realidad, desde entonces era claro que los comerciantes no iban a perder su tiempo en un mercado en el cual eran escasos los productos ofertados. Así que se tenía que cortar el monopolio que, en la práctica, se había creado. Una ciudad de nueve millones de habitantes no podía seguir dependiendo de un mercado pequeño e inadecuado, en el cual las limitaciones de infraestructura terminan generando distorsiones, las que, a su vez, se trasladan a los precios que todos pagamos.
Sin embargo, tanto la anterior administración municipal como la actual parecían intimidados por los dueños de los puestos de La Parada y no les daban el puntillazo. Más aun, cuando luego de meses dudando finalmente la alcaldesa Villarán decidió actuar, lo hicieron de modo improvisado, resultando en los violentos incidentes que el mundo entero ha presenciado.
Por otro lado, la capacidad de reacción por parte de la Policía luego del fracaso del jueves ha sido notable, corrigiendo errores y actuando de inmediato. Pero la principal lección es que nunca se debieron haber apresurado y no pueden ceder ante la presión política, si ese fue el motivo por el que el operativo fue adelantado. Por ello, tiene que llevarse a cabo un post mortem de este episodio y detallarse específicamente qué motivó el que fuera tan mal preparado.
Al final, no podemos caer en triunfalismos solo porque finalmente se ha hecho algo bien. Lo del sábado debería de ser la regla en lugar de la excepción para nuestros gobiernos y funcionarios.
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