Eliane Karp apeló a la ironía y la sorna para no responder

Durante la sesión de casi seis horas ante la Comisión de Fiscalización del Congreso, la exprimera dama Eliane Karp utilizó el sarcasmo y hasta un tono soberbio para contestar la mayoría de preguntas de los 14 legisladores que le plantearon interrogantes respecto a su presunta participación en las compras millonarias de inmuebles que realizó su madre, Eva Fernenbug.

Pero las respuestas de Karp, además, dejaron vacíos y contradicciones que no fueron aclarados, a consideración de varios congresistas de la oposición.

Karp llegó al Legislativo acompañada de su esposo, el exmandatario Alejandro Toledo –a las 9 y 30 de la mañana–, quien se había presentado en ese mismo grupo de trabajo el viernes pasado por el mismo caso, el cual es investigado a su vez por la 48 Fiscalía Penal de Lima (lavado de activos) y por la Fiscalía de la Nación (enriquecimiento ilícito).

Al inicio de su intervención, la exprimera dama dio una declaración similar a la que brindó Toledo, cuestionando la labor de Fiscalización y aduciendo que hubo adelanto de opinión de sus integrantes, así como la supuesta vulneración del debido proceso.

Su exposición se centró en negar que hubiera existido contradicciones o mentiras en las versiones iniciales que dio ante la prensa, junto a Toledo, y en señalar que el empresario Josef Maiman –al atribuirse la propiedad de los millonarios montos– garantizó el origen lícito de los fondos, pues las transacciones se realizaron a través del sistema bancario.

Llegada la etapa de las preguntas, los parlamentarios efectuaron varias interrogantes y comentarios que incomodaron a la investigada, ante lo cual Karp contestó envalentonada con frases cargadas de sarcasmo y sorna.

SIN RESPUESTAS
Pero lo más relevante fue lo que no respondió.

Los congresistas Mauricio Mulder, Alejandro Aguinaga y Juan José Díaz, por ejemplo, insistieron en preguntarle sobre la aparente versión contradictoria que dieron ella y Alejandro Toledo, en febrero último, en un programa de televisión, y en mayo reciente, en Fiscalización, cuando dijeron que la mansión de Las Casuarinas le pertenecía a Fernenbug y que había sido adquirida “con los ahorros de toda su vida”, e incluso se llegó a mencionar una hipoteca en Costa Rica.

Pero, como ya se sabe, por declaraciones de la propia Karp, Toledo y Maiman, ante la 48 Fiscalía Penal, desde el 2009 el empresario ya les había encargado buscar “inversiones inmobiliarias” en el Perú, y una de esas propuestas era el predio de Las Casuarinas.

Karp trató de explicar su participación –según dijo, en cuatro pasos– en las inversiones de Maiman. No obstante, eso solo demostró que conocía más detalles de lo que, meses después, negó.

Tampoco se entiende que no recordara, este año, que en 2012 se pagaron las hipotecas de las casas de Camacho y Punta Sal con fondos de Ecoteva. También se dejó en evidencia otra flagrante contradicción pues, ante la notaría, Eva Fernenbug señaló que para comprar la casa de Las Casuarinas usó “fondos propios”, lo cual ahora colisiona con el testimonio de ella y de Toledo.

ELIANE DIXIT

- “¿Qué pasa? Estoy hablando en tres idiomas y no me entienden”.

- “Tal vez tenga problemas de idioma, pero no soy idiota”.

- “Muchas horas y muchos oídos para no comprender nada”.

- “En cuanto al Tribunal de la Inquisición, estoy segura, señor (Héctor) Becerril, de que si existiera, ya usted me hubiera quemado con mucho gusto”.

- “Me atacan por la envidia que le tienen a mi esposo”.

• “¡Diez veces la misma pregunta! ¡Mezclan conceptos, frases y adjetivos! ¡Se mezclan papas con camotes!”.

- “Por qué siempre ir hacia lo malo, señor Mauricio Mulder. Usted tiene mucho verbo florido y mañosería… Es que lo quiero (a Mulder)… No se me ponga celoso (a Vicente Zeballos)”.

- “La única verdad que ustedes (los legisladores fujimoristas) quieren vender y escuchar es que el presidente Toledo se inculpe y se retire de la política”.

- “Señor Zeballos, no sé cuántas veces usted ha defendido la democracia”.