Elidio Espinoza Quispe es un oficial retirado de la Policía y ahora un novel burgomaestre que cada vez gana más espacio político. No solo les arrebató la Alcaldía de Trujillo a los favoritos: el Partido Aprista Peruano y Alianza para el Progreso (APP), sino que ahora ha asumido la vicepresidencia de la Asociación de Municipalidades del Perú (AMPE). Uno de sus primeros anuncios ha sido que denunciará a sus similares que intenten lucrar con el dinero de los peruanos.
¿Cómo encontró a la AMPE?
No hemos encontrado ni un sol en sus arcas y, además, está endeudada con la Sunat. Tampoco tiene local propio, estuvo funcionando en una sede partidaria de Alianza para el Progreso (agrupación política del ex presidente de la AMPE, César Acuña), situada en Jesús María, en Lima. Además, los aportes para las elecciones de febrero se depositaron en la cuenta de una persona que nada tiene que ver con la AMPE. Ya hay una comisión revisando todos estos temas, pues la institución no estuvo funcionando como debiera ser. Nunca fue un nexo entre alcaldes y los ministerios para ejecutar proyectos.
El cargo de alcalde es motivo de objeciones desde hace años, ¿cómo cambiar esa imagen?
Muchas personas piensan ser millonarias y para eso quieren ingresar a una alcaldía. Creen que manejar recursos públicos es una fuente de ingresos de la que pueden aprovecharse. Lo que diremos es que esta gestión de la AMPE va a denunciar públicamente a quienes intenten enriquecerse con el cargo. No vamos a coludirnos con esos actos para no afectar la imagen de nuestra institución.
Pese a las objeciones, los burgomaestres proponen la reelección inmediata.
Durante la campaña para llegar a la AMPE ofrecimos presentar una iniciativa legislativa, porque muchos alcaldes nos dijeron que un periodo es muy corto para trabajar por su municipio y deseaban ir a la reelección inmediata. Quiero dejar en claro que esa no fue mi idea y que yo no soy amante de la reelección de ninguna manera. Yo pedí únicamente solo una oportunidad para ejercer el cargo y así será.
¿Apoyará un planteamiento que no comparte?
No comulgo con ello, pero no me puedo oponer a lo que pide la mayoría de los 2,500 burgomaestres, entre provinciales y distritales. Además, una eventual reelección de los alcaldes dependerá de la ciudadanía, que será la que finalmente los volverá a elegir o no.
Otro polémico tema es el aumento de sus sueldos.
Hay muchos alcaldes del país que con lo que ganan no pueden llegar a Lima para hacer gestiones y presentar sus proyectos. Hay localidades donde los burgomaestres ganan entre 800 y 1,200 soles. La propuesta va dirigida para quienes no pueden cubrir sus necesidades con salarios bajos. Hay que buscar un sueldo equiparado.
¿Se puede pedir aumento solo para algunos alcaldes?
Hay 44 comisiones en la AMPE revisando esta propuesta. Podemos presentar una norma para solicitar el incremento solo para alcaldes que gobiernan en lugares de pobreza o buscar alguna otra alternativa de solución. El aumento no es para todos.
¿Qué iniciativas tienen para la seguridad ciudadana?
Yo presido esta comisión en la AMPE y presentaremos al Congreso un proyecto de ley de apoyo a los serenos, que busca dotarlos de un seguro y otros beneficios. Con esto podrán trabajar tranquilos, porque sabrán que si les ocurre un accidente no serán abandonados.
Diversos alcaldes piden que el Ejército patrulle las calles, ¿eso mejoraría la seguridad?
Esa no es la labor de las Fuerzas Armadas. Nos apena lo que sucede en Lima, que está viviendo la realidad que Trujillo tenía hace ocho años. La criminalidad se vencerá garantizando la aplicación de penas y atacando la corrupción. No pedimos ampliación de sanciones, sino que se aplique la ley. Cuando se modificaron las penas para adultos, tuvimos niños sicarios. En Trujillo hay menores entre los 9 y 12 años metidos en hechos de violencia, así que hay que evitar que otras regiones del país pasen lo que se vive en el norte.
¿Trujillo es un lugar violento todavía?
En algún momento se le comparó con Medellín y Cali, en Colombia, pero ya salimos de esos niveles de violencia porque las autoridades se unieron a la lucha que iniciamos con la Policía. Yo, incluso, voy a las operaciones para cerciorarme de ello. Soy de los que salen a las calles, porque no soy un alcalde de escritorio.
Pese al crecimiento económico en Trujillo, ¿sus funcionarios son los peores pagados del país?
Hay críticas de opositores, pero lo que no se sabe es que los gerentes de otros municipios de la región y del país ganan más de S/.5 mil y acá estamos muy por debajo (entre S/.2,500 y S/.4,000). Y no habrá incremento porque esos montos ya están en el presupuesto anual. Hay que valorar que con estos sueldos se hacen los mejores esfuerzos.
¿Quizá por ello entregó bonos que luego generaron controversia?
Acá no hay compensación, la única compensación es con el trabajo que ellos están haciendo. Todos los pagos que hemos hecho han sido legales y si existen denuncias, provienen de gente que siempre busca protagonismo.
AUTOFICHA
- “Nací en Chepén y serví a la Policía por más de 35 años. Fui elegido por las autoridades como el Policía del Año los años 2007, 2008 y 2010. Pese a ello, afronto por cuarta vez un juicio por un presunto ‘escuadrón de la muerte’. En los tres primeros procesos fui absuelto”.
- “Inicié mi carrera política en el 2013, con el Movimiento Regional para el Desarrollo con Seguridad y Honradez. En el 2014 fui elegido alcalde de Trujillo y ahora soy vicepresidente de la AMPE. Presido la Comisión de Seguridad Ciudadana”.
- “La inseguridad creció en Trujillo y el país porque existen autoridades, en todos los niveles, que muchas veces se dejan seducir por el dinero fácil. Hay quienes reciben dinero o se hipotecan en campañas electorales y luego, incluso, terminan siendo extorsionados”.
Por: Alan Benites.
abenites@peru21.com
Si te interesó lo que acabas de leer, recuerda que puedes seguir nuestras últimas publicaciones por Facebook, Twitter y puedes suscribirte aquí a nuestro newsletter.