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Murió la enfermera del beso que simbolizó el fin de la Segunda Guerra Mundial

Greta Zimmer Friedman aseguró que no se enteró que la habían fotografiado hasta 20 años después. Además, indica que no conocía al marinero que le dio el beso.

(Alfred Eisenstaedt/ Revista Life)
(Alfred Eisenstaedt/ Revista Life)

La mujer que aparece en la famosa fotografía besándose con un marinero en Nueva York tras el anuncio del fin de la Segunda Guerra Mundial murió a los 92 años, anunció este sábado el New York Times.

Greta Zimmer Friedman sucumbió a una neumonía, precisó su hijo Joshua Friedman al diario.

El 14 de agosto de 1945, esta ayudante de dentista, de 21 años, recibió un apasionado beso de un marinero de la US Navy en Times Square, en Nueva York, tras el anuncio de la rendición de Japón.

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El fotógrafo Alfred Eisenstaedt captó ese instante y la imagen fue publicada a toda página en la célebre revista Life. La fotografía se convirtió rápidamente en el ícono del final del conflicto.

Gracias a un libro publicado en 2012 sobre la simbólica imagen, se pudo identificar a la pareja como Greta Zimmer Friedman y George Mendonsa.

En realidad, la pareja no se conocía antes de ser inmortalizada en esta instantánea. En la foto, incluso, se puede ver a la que sería la futura esposa de George Mendonsa, Rita Mendonsa, que sonríe detrás de su pretendiente.

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En 2005, en una entrevista para el proyecto histórico de los veteranos, Greta Zimmer Friedman explicó que no había visto la imagen hasta 1960, cuando hojeaba un álbum de fotos de Eisenstaedt.

“De repente, me agarró un marinero. No fue tanto un beso como un acto de celebración: él ya no tenía que volver al Pacífico, al frente donde había combatido. Me tomó en brazos porque me vio vestida como una enfermera y estaba agradecido a todas las enfermeras. No fue algo romántico, sino una forma de decir: ‘Gracias a Dios, la guerra ha terminado”, contaría Greta Zimmer.

“Yo había ido con una amiga a un show al Radio City Hall, cuando interrumpieron para decir que la guerra había acabado. Salí fuera, estaba exultante, vi a una enfermera y la besé por pura alegría”, recordó, por su parte, Mendonsa.


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