Gustavo Vargas, gerente general de Lamia, aerolínea de Bolivia cuya nave se estrelló en Antioquía, Colombia, con el equipo de fútbol Chapecoense a bordo, fue arrestado este martes con otros dos funcionarios de la empresa, informó la Fiscalía.
El fiscal Iván Quintanilla, miembro de la comisión que investiga a Lamia, declaró a la prensa que la detención forma parte de una investigación. Asimismo, detalló que además de Vargas, se arrestó a la secretaria y el mecánico de la empresa.
Lamia es investigada por supuestas responsabilidades en el accidente del avión que cayó en Antioquia con 77 personas a bordo. La tragedia ocasionó 71 muertos, entre ellos los jugadores del Chapecoense. Solo sobrevivieron seis personas.
Diás atrás, Vargas admitió al diario boliviano Página Siete que la nave debió haberse reabastecido de combustible en el poblado boliviano de Cobija, en el extremo norte del país, para continuar su ruta hacia Colombia.
Asimismo, las autoridades encontraron indicios de irregularidades en el funcionamiento y operaciones del avión. Ante ello, como primera medida, el ministerio de Obras Públicas y Servicios ordenó destituir a altos funcionarios aeronáuticos de Bolivia.
Una de las principales hipótesis del accidente es que el avión se estrelló porque no tenía más combustible.
La funcionaria que aprobó el plan de vuelo pese a que supuestamente había observado problemas en la cantidad de combustible, solicitó refugio en Brasil.
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