Carlos Viguria
@cviguria
Eduardo Ponce Vivanco – ex viceministro de Relaciones Exteriores del Perú, embajador ante ALADI en Ecuador, Gran Bretaña y Brasil, y representante de Perú ante la ONU en Ginebra y rector de la Academia Diplomática— se comunicó con Perú21 para analizar los resultados del plebiscito de los acuerdos de paz entre el gobierno de Colombia y las FARC.
¿Qué opinión tiene sobre estos resultados que contradicen las encuestas que daban como favoritas al ‘sí’?
Que fueron defectuosas, que se manipularon o que los encuestados no dijeron lo que sentían. A mí me complace el resultado porque los acuerdos chocaban contra mis valores, pero me apena el fracaso del presidente Juan Manuel Santos y no quiero que sea el fracaso de Colombia.
Felizmente, su reacción ha sido positiva. Ha invitado a los propulsores del No a sumarse al esfuerzo para llegar a una paz que pueda ser respaldada por una auténtica mayoría y que no signifique una legitimación del uso de la violencia como arma de acción política. Los términos de la paz no pueden ser impuestos por el narcoterrorismo.
¿Cuáles son sus impresiones sobre el ausentismo en las votaciones, considerando que solo el 37.28 las personas acudió a votar?
Es probable que anticiparan un triunfo del ‘sí’ y creyeran que no valía la pena votar. Yo pienso que, en realidad, los ausentes habrían votado por el No.
¿Qué proceso le sigue a los acuerdos? ¿Irá a fojas cero? ¿Retomarán las negociaciones y convocarán a un nuevo plebiscito, pese a que el presidente no tiene la obligación?
‘Timochenko’ ha anunciado que respetarán el cese de fuego y seguirán negociando. Es alentador que hayan aceptado el pronunciamiento plebiscitario y la rama de olivo que, en un gesto de grandeza, les ha alcanzado el Presidente Santos para continuar negociando en La Habana.
Finalmente, ¿qué opción les queda a las FARC?
Las FARC deben ser consecuentes con lo que han reconocido a última hora para promover el ‘sí’. Me refiero a su compromiso de ayer, ofreciendo sus incalculables fondos criminales para reparar a las víctimas de sus atrocidades. Si volvieran al terrorismo no solo se arriesgarían a ser exterminadas sino que asegurarían el triunfo de Álvaro Uribe en las elecciones del 2018.
El triunfo del ‘no’ es una victoria contundente para él. También es importante considerar que el pronunciamiento del ELN sobre los resultados de hoy permite vislumbrar la posibilidad de embarcarlos en las negociaciones, lo que sería definitivamente prometedor.
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