La Corte Suprema chilena cerró definitivamente la investigación sobre la muerte del exmandatario socialista Salvador Allende en 1973, estableciendo que se suicidó en el interior de la casa de gobierno en medio del golpe militar liderado por Augusto Pinochet.
En un fallo dividido del 6 de enero, la Sala Penal del máximo tribunal chileno desestimó dos recursos de casación (anulación), presentados por querellantes en la causa, que planteaban que el expresidente pudo haber sido asesinado.
“Esa tesis fue desestimada pericialmente, comprobándose que la magnitud de la energía cinética de las lesiones provocadas por el tipo de arma usada explica las heridas a distancia existentes en los tejidos blandos de la cara”, dice la sentencia de los jueces de la Corte Suprema.
“El hecho investigado no es constitutivo de delito y por ese motivo se sobresee total y definitivamente la causa”, agrega el fallo.
En setiembre de 2012, el juez titular de la causa, Mario Carroza, estableció por testigos, pericias y datos de la indagatoria que el mandatario socialista se suicidó con un disparo de fusil en su barbilla.
Durante la indagatoria, Carroza ordenó la exhumación del cadáver de Allende y sometió sus restos al análisis de una comisión internacional de expertos.
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