03.MAY Viernes, 2024
Lima
Última actualización 08:39 pm
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Opinión

¡Ay Ollanta ay! ¡Cuántos agravios debe soportar cada vez que decide pensar por su cuenta! El elenco de periodistas iluminados, que califica de mamarracho todo aquello que no sea exactamente lo que reproduce su propio pensamiento, infla su furia, descalifica, amenaza y como si eso fuera poco, cree hablar en nombre de la sensatez y de la mayoría de los peruanos.

Guillermo Giacosa,Opina.21
ggiacosa@peru21.com

Me espanta la intemperancia, la pedantería, la agresividad y la ausencia total de realismo cuando critican. Un poco de humildad a la que obligaría la crisis no les vendría mal. Están hipnotizados por un modelo que tiene más grietas que tierra firme y que exhibe sus pústulas, a la que nuestros iluminados parecen sordos y ciegos, en una Europa que se asoma a la tragedia. En España con una desocupación del 27.2% su gobierno anuncia que habrá 4 años más de sequía laboral. Ello significa hambre, suicidios y una situación prerrevolucionaria. Mientras eso ocurre, un banquero del Banco Santander se retira con una compensación de 88 millones de euros. Cada cual recibe según sus merecimientos y el hombre pertenece a una corporación privada, dirán los iluminados, olvidando que más allá de lo privado y lo público hay una comunidad humana que habita el mismo tiempo y espacio y lo siente como una burla a su dramático sobrevivir cotidiano. Esas son las reglas del juego fuera de lo cual todo lo demás es considerado mamarracho. Esa distancia abismal, esa convivencia de lujo desmedido y hambre desesperado, de yates y ranchos, de hartazgo y anemia es la lógica de este sistema que la prensa vende a sus incautos seguidores. Su última novedad es ofrecer, en formato telenovela, la pelea del embajador ecuatoriano, la respuesta de Correa, la “ofensa” de Maduro a Roncagliolo, o el video de Nadine.


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