Cada vez Chimbote se vuelve más peligrosa, al punto que ya la comparan con la peligrosísima Ciudad Juárez, en México. Ello no es gratuito, pues en este año ya se han registrado 91 asesinatos cometidos por sicarios, los tres últimos ocurrieron justamente en la madrugada de ayer, tras una violenta balacera en una vivienda del pueblo joven Alto Perú.
Según narraron los vecinos de la zona, el ataque ocurrió al promediar la una de la mañana, cuando cuatro sujetos desconocidos llegaron en un auto Toyota Yaris color negro hasta el inmueble ubicado en el lote 8 de la manzana D y, tras abrir la puerta con una piedra, abrieron fuego contra todas las personas que se encontraban adentro en una reunión.
Los habitantes de la casa, que también estaban armados, respondieron el ataque, pero fueron reducidos por los agresores que, según la Policía, portaban armas de corto y de largo alcance. Después de varios minutos de intercambiar disparos, los atacantes salieron de la vivienda y huyeron.
Los fallecidos fueron identificados como Manuel Ezequiel Cruz Moreno (24) y Ángel Pierre Ágreda Saavedra (29), alias ‘Ángel’, quien tenía una requisitoria por lesiones graves. Un tercer sujeto no pudo ser identificado, pero dejó de existir en el Hospital La Caleta a causa de los dos balazos recibidos en la espalda. Además, John González Valdiviezo (23) resultó herido por el impacto de varias balas en diversas partes del cuerpo.
Los peritos de Criminalística de la Policía hallaron en la escena del crimen 15 casquillos calibre 9 milímetros percutados y dos cartuchos para fusil, así como otras municiones y correas de lona, al parecer usadas como portafusil. Debido a ello, se presume que se trató de un ajuste de cuentas entre bandas delincuenciales rivales. Empero, también se baraja la hipótesis de una venganza entre extorsionadores de Construcción Civil.
DATOS
- Según las estadísticas de la Policía de Chimbote, en los últimos 15 días se han registrado ocho casos de extorsión en distintos puntos de la ciudad.
- Los delincuentes no solo dejan sobres con balas y cartas, sino que se han atrevido a detonar cargas de dinamita en viviendas.
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