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Opinión

Así los bautizó el FBI, que ya tiene una oficina dedicada a investigar este tipo de delitos que puede afectar, principalmente, a celebridades, políticos y a algunos religiosos pícaros.

Guillermo Giacosa,Opina.21
ggiacosa@peru21.com

‘Hackerazzi’ combina dos palabras: “hacker” y “paparazzi”, y quienes integran ese grupo irrumpen clandestinamente en las computadoras de otras personas para espiar o robar archivos e información, o también en páginas de Internet para alterarlas. Supongo que el FBI y otras agencias –de seguridad para ellos y de inseguridad para el mundo– deben tener bien pagado un elenco de ‘hackerazzis’ propios. Estos últimos deben robar con fines políticos y de chantaje; los otros, los informales, se dedican básicamente al chantaje, sin descontar que algunos lo practiquen simplemente por curiosidad. Robar de una computadora la foto de alguna celebridad calata o en actividades amorosas es, habida cuenta del amplio sector de prensa vomitiva que puebla el planeta, un magnífico negocio. ¿Inmoral? Por supuesto. Pero, cuántas cosas lo son sin que nos demos cuenta. ¿O creen que mentir desde los titulares periodísticos no es inmoral? Como dice el tango Cambalache: “Los inmorales nos han igualado”. Y, eso, porque fue escrito en 1920. Ahora podríamos decir: los inmorales nos han superado. Nos están ganando por paliza, pero no porque sean más, sino porque detentan el poder político y económico, y porque, además, suelen gozar de la condescendencia de muchos medios, para los cuales el negocio pasa por deformar u ocultar.

Se advierte que ya se viene los hackeos a los celulares, por lo que sugerimos, desde ya, incluir la discreción como una virtud cardinal de sus conversaciones.


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