La reducción en el tamaño promedio de los departamentos empezó hace unos diez años. Es un efecto en cadena pues ante los mayores precios de los terrenos se elevan los costos de las constructoras, y ello impacta en el precio de venta final. No hay forma de frenar esta cadena.
Otro factor que impulsó la tendencia de menores tamaños es el programa Mivivienda. El fondo ofrece un subsidio de S/.12,500 para viviendas con un precio máximo de S/.182 mil y, recientemente, ese tope fue elevado a S/.255 mil.
Este segmento de viviendas tiene mayor salida gracias al atractivo del bono al buen pagador que entrega el Estado. Las inmobiliarias buscan que los departamentos que venden sean financiados por este fondo. Debido al alza de precios, la alternativa que tienen es reducir el tamaño del inmueble.
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