Un jurado estadounidense ordenó este martes a los cantantes Robin Thicke y Pharrell Williams a pagar US$7 millones a la familia de Marvin Gaye, alegando que los artistas le plagiaron el éxito Blurred Lines, compuesto en 2013.
Los ocho miembros del jurado, que deliberaron durante dos días, afirmaron que las estrellas del pop tomaron partes del éxito de Gaye de 1977 Got to Give It Up.
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“Estoy tan emocionada que es difícil expresarlo con palabras”, dijo Mona, la hija de Marvin Gaye, quien explicó que su familia emprendió acciones legales “porque él (Gaye) no puede hacerlo por sí mismo”. Gaye murió por un disparo de su padre en la víspera de su 45 cumpleaños, en 1984.
Tras el veredicto, el abogado de la familia Gaye, Richard Busch, dijo que planeaba solicitar una medida cautelar para el bloqueo de las futuras ventas de Blurred Lines.
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En el juicio testificaron tanto Pharrell Williams como Robin Thicke, aunque ninguno estuvo en la sala para escuchar el veredicto.
En declaraciones a la revista Rolling Stone, el representante de Williams dijo que está “extremadamente disconformes con el veredicto de hoy, que establece un horrible precedente para la música y la creatividad de ahora en adelante”.
“Pharrell compuso Blurred Lines desde su corazón, mente y alma, y la canción no fue tomada de nadie más. Estamos revisando la decisión y considerando otras opciones”, añadió.
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