Han sido días intensos para Juan Carlos Oblitas. Ayer, ni bien fue oficializado como director deportivo de la FPF, se refugió en la playa para descansar del asedio periodístico y empezar a trazar su plan maestro.
[Juan Carlos Oblitas es el nuevo director deportivo de la selección peruana]
El ‘Ciego’ está ilusionado, pero la ilusión va más allá de ir al Mundial de Rusia 2018. “Acepté el cargo porque me siento con la capacidad de aportar mi experiencia para el cambio del fútbol peruano”, dijo. A los 63 años, Oblitas ha vuelto a la cancha con el pelo cano y la energía intacta. Ya guardó el buzo de DT y la camiseta ‘11’ que paseó dos veces en mundiales. Ahora ejercerá de ‘10’.
Director deportivo, un cargo inédito. ¿Cuál será el alcance de tus funciones en Videna?
Más que un coordinador, seré un facilitador de las funciones de toda la gente que está en el organigrama de la Federación, incluyendo los comandos técnicos de las selecciones. Mi idea es que exista una Unidad Técnica, pero eso se implementará en su momento. Por ahora, lo primero será nombrar al técnico para la Copa América y las Eliminatorias.
¿Estamos cerca del DT?
A partir de ahora, con mi designación, se va a comenzar a ver este tema. De todos modos, yo no voy a hablar de candidatos que propondrá el directorio. No quiero que se manosee el nombre de nadie como me pasó a mí en su momento.
Los dirigentes de la FPF han dicho que están dispuestos a hacer una gran inversión en el técnico. ¿Debemos gastar un dineral o buscar alguno que se ajuste a nuestra realidad?
Aún no sé cuál será el presupuesto para el cuerpo técnico, así que mal haría en hablar sobre el grupo de técnicos a los que podemos apuntar. Pero el costo de un entrenador no es garantía de éxito ni en la selección española ni en el Real Madrid. Tampoco lo es que haya dirigido aquí o conozca el medio, porque hoy la mayoría de profesionales está informada y ve partidos de todos lados.
Mucho se está hablando de escuelas: la colombiana, la argentina, la uruguaya, la brasileña. ¿Qué piensas de eso?
No hay que pensar mucho en escuelas, sino en una persona con mucha personalidad y liderazgo que sea vista como un referente por los jugadores y como una persona capaz de hacerlos creer en el cambio. Además, yo pienso que la única escuela que existe es la holandesa. Uno puede encontrar diversas metodologías de trabajo entre sus diferentes técnicos, pero el estilo, que es la manera de jugar, se mantiene a través de los años.
Tuvimos un estilo de juego hace 30 años. Algunos no ven que ya no existe más.
Yo me pregunto de qué estilo estamos hablando cuando se dice ‘hay que mantener nuestro estilo’. Yo creo que los últimos entrenadores intentaron que la selección tuviera una manera de jugar, pero no lo lograron. Ahora buscaremos eso. Más allá del sistema que se elija, queremos que el equipo tenga una manera de jugar. Muchos técnicos del extranjero mencionan el buen toque de Perú, pero hace falta incorporar otras cosas.
¿Como la presión? Los equipos competitivos lo hacen.
Si nosotros no pensamos implementar eso como premisa, no vamos a clasificar al Mundial. Hay que recuperar rápido la pelota, y para eso se debe ser agresivo en la marca.
Al jugador peruano le cuesta mucho presionar.
De la noche a la mañana no va a cambiar. Sobre todo aquí, donde se juega en condiciones tan distintas, cuesta mantener una dinámica. Porque una semana juegas en un campo bueno como el del Estadio Nacional, pero a la siguiente te vas a una cancha sintética, después te toca la altura y al final un lugar con mucho calor. Por eso digo que el trabajo no solo se basa en el DT de la selección: queremos mejorar las canchas, consolidar el fútbol base y muchas cosas más que debemos hacer en paralelo.
¿El tema de la disciplina será capital durante tu gestión?
No le tengo temor a este tema. El que no quiera alinearse no jugará en la selección, así de claro. Los jugadores deben tener un compromiso claro e integral con el equipo. El futbolista tiene que ser responsable dentro y fuera de la cancha.
¿Para ir a Rusia 2018 no basta que el técnico tenga personalidad y capacidad para convencer a los jugadores?
No hay una varita mágica, pero el entrenador debe tener autoridad sobre el grupo. Y después tendrá que trabajar mucho para ampliar el universo de jugadores, porque en este momento hay cuatro o cinco equipos en Sudamérica por encima de nosotros. Si somos fuertes en casa, cualquier cosa puede pasar.
¿Vale la pena ilusionarse?
Hay que manejar las cosas con ilusión, pero no se puede engañar a la gente. Que no se piense que porque ya no está Burga vamos a clasificar. Tenemos que ser pragmáticos. Nuestra situación es delicada y partimos desde donde nos dejó la anterior eliminatoria (antepenúltimos), ahora hay que empezar a subir peldaños.
DATOS
- Oblitas fue asistente de Vladimir Popovic durante la eliminatoria para Estados Unidos 1994. Luego, dirigió a la selección en el proceso rumbo a Francia 98. Perú quedó quinto y perdió el boleto por diferencia de goles.
- El ‘Ciego’ no tiene una deuda por cobrar. “Si hubiera aceptado el cargo de técnico se podría hablar de eso, pero no es el caso”.
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