Un jugador de la liga británica de rugby perdió uno de sus testículos tras recibir un fuerte golpe en sus partes íntimas durante la final del torneo, que su equipo terminó perdiendo por 26-18.
Paul Wood, de los Warrington Wolves, se enfrentaba a los Leeds Rhinos cuando se lesionó un minuto después de que empezara la segunda mitad, pero siguió jugando hasta el final. Cuando fue a un hospital para recibir atención ya era tarde.
“Mi testículo derecho se rompió, me dieron un rodillazo un minuto después de que empezara la segunda mitad, tuvieron que quitármelo”, tuiteó Wood, de 30 años y padre de dos hijos.
Pese a la mutilación, Wood hizo gala de buen humor en la red social y escribió: “Saliendo del hospital para ir a casa. ¿Siento como si hubiera dejado algo?” y “Tony Smith (el DT de Warrington) dijo en la plática con el equipo en la noche antes del partido ‘¡sus pelotas están en juego, chicos!’ no pensé que lo decía literalmente”.
Si te interesó lo que acabas de leer, recuerda que puedes seguir nuestras últimas publicaciones por Facebook, Twitter y puedes suscribirte aquí a nuestro newsletter.