Denuncia de acoso sexual callejero no fue atendida debidamente por la Municipalidad de San Isidro

El último lunes un incidente ocurrido en San Isidro puso de manifiesto la grave situación que afrontan las personas que son víctimas de acciones que podrían configurar los delitos de ofensas contra el pudor y acoso sexual callejero.

Según denunció la ciudadana Diana Chávez en su cuenta de Facebook, ella se encontraba trabajando en su oficina ubicada en San Isidro a las 11 am, cuando de pronto, un hombre le hizo señas desde la calle para que lo vea. Cuando él notó que ella lo miraba, el sujeto procedió a bajarse el pantalón, le mostró sus testículos y se habría masturbado en plena vía pública. Al terminar, el individuo se alejó del lugar de los hechos con dirección al Club Golf de San Isidro.

Chávez mencionó que avisó a la Municipalidad de San Isidro sobre lo ocurrido a través de Twitter. Pese a la alerta y luego de más de una hora, la Municipalidad solo informó que enviaría personal a la zona y “que agradecía la comunicación”.

Horas después, la afectada precisó que llegó una unidad del Serenazgo de la Municipalidad conducida por el señor Luis Alberto Sánchez. Al ser informado sobre los incidentes, el efectivo le respondió que el sujeto vivía en los alrededores y que no entendía qué quería que haga.

Según informó Chávez, más de siete horas después de ocurrido el incidente, se acercó al inmueble de los hechos el sub gerente de Seguridad Ciudadana de la Municipalidad de San Isidro, quien señaló que el agresor tiene alteraciones mentales. Cabría preguntarse si la Municipalidad cuenta con la capacitación respectiva para determinar si el sujeto en cuestión es inimputable de los actos denunciados.

Perú21 conversó con Jorge Venegas, representante del área de prensa de la Municipalidad de San Isidro, para obtener su versión de lo ocurrido. Venegas señaló que “no hay un caso de acoso como señala la señora sino es un acto de una persona con problemas mentales que vive en la residencial Santa Cruz, quien es una persona conocida de la zona”.

El funcionario manifestó además que efectivos de Serenazgo se acercaron ante la llamada para atender el caso y ubicó a la persona identificada como Alex Cárdenas. El funcionario mencionó que el agresor “no es una persona de la calle, no es un orate, tiene dirección y familia. Tiene problemas mentales, es cierto, pero tiene una familia que lo cobija. No es un loquito de la calle. Es conocido por tener problemas mentales mas no es conocido por masturbarse en la calle”.

El funcionario de la Municipalidad declaró también que de acuerdo a las competencias de la institución, es necesario encontrar al sujeto denunciado con las ‘manos en la masa’ (flagrancia). “No pueden actuar si es que no encuentran al sujeto bajo flagrancia de los actos para realizar algún tipo de detención y al señor no se le encontró en el lugar, por lo que se pidió que se haga la denuncia respectiva”.

Pese a que San Isidro es uno de los distritos más vigilados de Lima y que cuenta con cámaras de seguridad, el funcionario mencionó que “lamentablemente en el lugar donde se denunció el acto, no hay cámaras de vigilancia”

Por otro lado, Venegas mencionó, en principio, que el personal de Serenazgo habría llegado entre veinte y treinta minutos después de reportado el incidente. Reiteró además que los efectivos cumplieron debidamente con el protocolo.

El funcionario manifestó además que la denuncia se habría realizado a las 8:30 am. y que al tener noticia de lo sucedido, realizaron las indagaciones del caso. Luego de tres horas de haber hecho estas investigaciones y al ubicar al supuesto agresor, aproximadamente a las 11 am., se acercaron junto con personal de la Policía hacia donde se encontraba la denunciante. Según la Municipalidad, Chávez no realizó la denuncia respecta ante la Comisaría.

Por su parte, Chávez señala, como se puede apreciar en el siguiente mensaje, ella recibió recibió respuesta de la Municipalidad a las 12:35 pm.

El funcionario mencionó también que, como Municipalidad, le compete trabajar el caso con el área de Bienestar Social, por lo que la asistenta social de la institución dará apoyo al sujeto por temas de salud mental.

Cabe mencionar, que el incidente denunciado, configuraría los delitos de ofensas contra el pudor público (artículo 183 del Código Penal) y faltas contra las buenas costumbres (artículo 450, inciso 1 del Código Penal). El acto podría ser incluso sancionado por la nueva ley de acoso sexual callejero y sanciona al agresor con más de 12 años de cárcel.

En tiempos en los que la inseguridad ciudadana es un tema pendiente y de preocupación en nuestro país por los varios delitos que se cometen en las calles, estar dentro de un inmueble ya no asegura siquiera estar más protegido. Y, lamentablemente, las autoridades no toman las acciones efectivas para protegernos a nosotros, los ciudadanos.