Esteban Acuña
@estebanbigotes
Los accidentes de tránsito siguen siendo la principal causa de pérdidas humanas, según las cifras de la Organización Mundial de la Salud, y el Perú no es ajeno a esta problemática. Actualmente, cada 5 minutos se produce un accidente automovilístico, lo que deja un promedio de 162 personas heridas al día.
Durante julio de 2015 a julio de 2016, Pacífico Seguros, con el objetivo de determinar cómo manejan los peruanos, realizó una evaluación a más de 3,000 autos a nivel nacional con tecnología GPS Smart.
Los resultados del estudio determinaron que los peruanos en promedio tienen una calificación de 3.8, por debajo del mínimo (5.5), siendo la nota máxima un 10.
Entre otras conclusiones, se determinó que la principal causa de accidentes de tránsito en el país es el estilo de conducción agresivo: frenadas intempestivas, desaceleraciones, choques, cambios de carril repentino, entre otras.
¿Por qué manejan tan mal los peruanos? Con la ayuda de Alfonso Florez, gerente general de la fundación Transitemos, analizamos las razones detrás de los números.
Papeletas benignas
Para Alfonso Florez de Transitemos, las papeletas no tienen ningún efecto si la sanción no es efectiva.
“Hay una enorme cantidad de infracciones que no se cobran, y lo vemos cuando sale en la prensa que detuvieron a un chofer con 2,500 infracciones. Lo que pasa es que nuestra legislación es demasiado benigna, entonces los choferes profesionales tienen abogados especializados que se encargan de alargar la cobranza hasta que prescriben por ley”, explica.
Florez sostiene que en el Callao, desde que implementó su sistema de fiscalización electrónica, ha reducido mas de 50% su número de accidentes. “La fiscalización con sanción efectiva sí cumple un rol educativo”, afirma.
Un modelo peligroso
El llamado modelo comisionista afiliador, que impera en Lima, es fundamental para entender este problema.
Alfonso Florez explica cómo funciona: “Un chofer tiene que competir contra ocho choferes de la misma línea de transporte por un pasajero, tiene que matarse en la vía porque no puede quedar sin pagarle el día al dueño de la ruta”.
Florez sostiene que esto está cambiando con la reforma del transporte público. Con el nuevo modelo, explica, la ruta es concesionada por 10 años a una empresa —“y no a una persona“—, que debe acreditar la propiedad de la flota, choferes en planilla, y rotación cada cinco horas.
[El 54% de los conductores infractores limeños sufren de ansiedad al trabajar]
De este modelo también se desprende el estudio ‘Preferencia psicológicas del conductor limeño’ a cargo de la psicóloga Mónica Tamayo.
El estudio revela “que el 54% de los conductores que infringen las normas de tránsito manejan con signos de ansiedad y expresan la necesidad de competir con choferes en las pistas, pasando por alto la seguridad vial”.
El entorno condiciona
“Un conductor americano en Lima se acriolla muy rápido”, explica Florez.
Según el especialista, los extranjeros que conducen pueden esperar un largo rato antes de cruzar una pista, hasta que se dan cuenta de que la única manera de hacerlo es atreviéndose.
“Cuando un peruano conduce en otro país conduce bien, porque sabe que si no lo hace lo van a sancionar, y drásticamente”, afirma.
Licencias de conducir
Florez cuenta una reciente experiencia cuando fue a renovar su licencia de conducir.
“Fue increíble. Los tramitadores te ofrecen eximirte del examen de reglas, pero yo lo quise hacer bien. Hice mi examen médico y luego di mi examen, y me jalaron a la primera”.
“¿Por qué? —se pregunta— porque el 80% de las preguntas no tienen que ver con reglas de tránsito, sino con mecánica (cuántas ruedas de repuesto debe tener un auto, cómo reparar en caso de emergencia) y esto no tiene que ver estrictamente con la conducción”.
No se asume la responsabilidad
“Si yo conduzco a exceso de velocidad y mato a alguien no es accidente de tránsito, es una acción premeditada”, explica Florez. Los accidentes —explica— se refieren a un hecho fortuito (por ejemplo, que se pinche una rueda).
Lo correcto, según él, es referirse a la tasa de siniestralidad de los ‘incidentes de tránsito’. “Al llamarlo accidente se le quita la responsabilidad a quien ocasiona el incidente”, sostiene el especialista.
Error de conceptos
¿Existe alguna diferencia entre infracción de transporte e infracción de tránsito?
“Pasar la luz roja o ir a exceso de velocidad es una infracción de tránsito; parar en el paradero, contar con las autorizaciones correspondientes son infracciones de transporte”.
La infracción de transporte tiene que ver con cumplir las condiciones mínimas reglamentarias para ejercer un servicio público.
Según Florez, entender estos conceptos es fundamental para los conductores, puesto que los hacen más conscientes de las reglas que les corresponde acatar cuando conducen.
De paso, subraya que cualquier Policía no puede imponer una multa. “Solamente la policía de tránsito puede sancionar”.
Educación vial e infraestructura
Flórez relata que en 2011 se presentó un proyecto de ley que hacía obligatoria la educación de seguridad vial a todo nivel educativa, desde primaría hasta la universidad.
El proyecto fue aprobado por la comisión de transporte, pero fue denegado por la comisión de educación. “¿Por qué? porque le genera gasto al Estado”, explicó.
Punto aparte señaló que “no se le puede enseñar a un niño lo que no existe en la realidad: si no tienes señalizadas las calles no sirve de nada, porque el niño sale de la escuela buscando un semáforo o un paso de cebra y no lo encuentra, o si lo encuentra nadie lo respeta”.
En ese sentido, afirma que la falta de infraestructura es un factor determinante en la tasa de siniestralidad de los incidentes de tránsito, y que, sumado al cansancio de los conductores, el riesgo aumenta.
Te puede interesar
Concesión de Rutas de Lima aparece en el Departamento de Operaciones Estructuradas de Odebrecht (área de coimas) https://t.co/EW1RIxNQTu pic.twitter.com/veJodHjQiu
— Diario Perú21 (@peru21noticias) 3 de mayo de 2017
Si te interesó lo que acabas de leer, recuerda que puedes seguir nuestras últimas publicaciones por Facebook, Twitter y puedes suscribirte aquí a nuestro newsletter.