A través de un proceso de fundición, el Ministerio del Interior destruyó 3,567 armas de fuego que fueron incautadas en hechos delictivos o entregadas voluntariamente.
“La destrucción de armas ilegales es una de las formas en las que podemos reducir esta creciente violencia”, dijo el ministro Walter Albán.
El titular del Mininter afirmó que los decomisos de revólveres, pistolas, carabinas y armas de fabricación artesanal se han incrementado. Dijo que 300 escopetas serán donadas a la Marina de Guerra del Perú para ser fundidas y construir un monumento por la paz.
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