Miembros de la Superintendencia Nacional de Aduanas y de Administración Tributaria (Sunat) intervinieron dos vehículos que transportaban 220 kilos de pirotécnicos sin autorización ni comprobantes de pago que justifiquen su comercialización e ingreso a Lima. El cargamento había sido camuflado entre material de reciclaje y artículos de tocador.
El primer vehículo, con placa de rodaje A4M-831, perteneciente a la empresa J. VRAE, fue intervino en la Garita de Control de Pucusana de la Sunat. Cuando se pidió la documentación tributaria, el chofer señaló que transportaba material reciclado proveniente de Ayacucho, lo que llamó la atención de los fedatarios que efectuaron una revisión física del supuesto cargamento.
Así se detectó un lote de pirotécnicos entre los que se encontraron 320 paquetes de “cohetecillos” y 432 “avellanas”, cuya potencia ha ocasionado severos daños físicos y muchas muertes por intoxicación al ser ingeridos por niños, que suelen adquirirlos por su bajo precio.
También se encontraron 88 kilos de pólvora y cartuchos vacíos, insumos utilizados en la elaboración de este tipo de detonantes, cuya venta directa al público está prohibida, según el Instituto de Defensa Civil (Indeci).
Cabe precisar que durante la inspección se tuvo que romper los precintos de seguridad del cargamento, que tenían el logo de una conocida tienda por departamento. Estos habían sido utilizados para tratar de burlar los controles tributarios dando a entender que fueron contratados por dicha empresa para realizar el traslado del material reciclado.
En otra intervención, que se realizó en el mismo lugar, se detectó un vehículo proveniente de Arequipa, con placa F4Z-436, transportando 90 kilos de pirotécnicos (como ‘volcanes’, ‘voladores’, ‘misiles’ y las peligrosas ‘tortas’ que pesan hasta un kilo y medio), camuflados entre artículos de tocador (jabones y champú). Estas mercancías tampoco tenían comprobantes.
PIROTÉCNICOS FUERON ENTREGADOS A LA SUCAMEC
Tras elaborar las actas de incautación, el lote de productos fue trasladado al almacén principal de la Sunat, ubicado en Santa Anita. Los pirotécnicos serán entregados a la Superintendencia Nacional de Control de Servicios de Seguridad, Armas, Municiones y Explosivos de Uso Civil (Sucamec), en tanto se realizan las investigaciones policiales para identificar a los responsables de este ilícito.
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