Unos 120 campamentos de minería ilegal fueron destruidos durante un operativo denominado ‘La Cumbrera 2015’, que se realizó durante 2 días en la provincia de Quispicanchi, en el Cusco, pese a que mineros ilegales y pobladores de la zona intentaron impedir la operación en la que participaró la Fiscalía Especializada en Materia Ambiental (FEMA) y 500 policías.
Según informó el Ministerio Público, los mineros pretendieron frenar el ingreso de los efectivos haciendo detonar cartuchos de dinamita en su afán de amedrentar a las autoridades. Sin embargo, las autoridades recuperaron el control de la situación y se produjo la intervención de la zona.
Así mismo, fueron decomisadas 8 perforadoras, 25 comprensoras, 32 grupos electrógenos, una exacavadora, un cargador frontal, 6,000 cartuchos de dinamita, 4 mil metros de mecha lenta, 40 cajas de fulminante de cien unidades cada una, 30 sacos de nitrato de amonio de cuarenta kilos cada uno, 2 mil metros de manguera de agua y 2 mil metros de manguera de aire.
Los resultados se obtuvieron luego de un trabajo de inteligencia realizado durante varias semanas por la Policía y la Fiscalía, procediéndose el 22 de diciembre a dar inicio al Plan de Operaciones N° 45 de interdicción a la minería ilegal, encabezado por la fiscal de FEMA-Cusco, Karina Garay Tapia; y al mando del coronel PNP Miguel Muñoz Ysahara y el comandante PNP Raúl Aybar Huacho.
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