Rodolfo Orellana: Fiscalía lo vincula con un extestaferro de Vladimiro Montesinos

Dos operaciones bancarias sospechosas detectadas por la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) a un testaferro de Rodolfo Orellana han puesto en evidencia una relación desconocida hasta ahora: la vinculación de este procesado por actos de corrupción con un ex socio de Vladimiro Montesinos, Juan Valencia Rosa.

De acuerdo con el informe de la UIF, que obra en la investigación del Ministerio Público –a la cual tuvo acceso Perú21–, en diciembre del año 2013 el empresario textil Pedro Cárdenas pagó, con dos cheques de gerencia, S/.195 mil a Eduardo Smith Rodríguez por la adquisición de la tienda T-5 de la galería Yuyi, ubicada en el emporio comercial de Gamarra.

La alerta vino porque Smith Rodríguez era testaferro de Orellana y el propietario real de la tienda era Valencia Rosas.

Pero había una sorpresa más. Al realizar la consulta en la Superintendencia de Registros Públicos sobre la referida tienda, inscrita en la partida electrónica 11167410, se observa que el titular es la Caja de Pensiones Militar Policial (CPMP).

Sin embargo, Perú21 comprobó, en la oficina de administración de la galería comercial Yuyi, que la tienda T-5, en efecto, continúa siendo de propiedad de Juan Valencia Rosas.

Pero, además, tiene otras tiendas a su nombre en la misma galería (T-176, T-177, T-188 y T-1004), cuyo valor comercial, por unidad, supera los 60 mil dólares americanos.

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En la declaración testimonial que diera ante la Fiscalía el 23 de junio último, Pedro Cárdenas contó que conoció a Eduardo Smith Rodríguez por intermedio de Juan Valencia Rosas, dueño del establecimiento comercial en venta T-5.

Por ese motivo, dijo, le giró los dos cheques de gerencia a su nombre y no al del propietario. Trascendió que Cárdenas habría entregado a la Fiscalía copia de los comprobantes de pagos por 60 mil dólares en efectivo que le extendieron Zoila Montoya y Patricia Rojas (ambas procesadas en el caso Orellana) en la avenida Guardia Civil, sede de la revista Juez Justo, también conocida como el búnker de Orellana.

De esta forma, Cárdenas había entregado a Valencia Rosas 195 mil soles en cheques a través de Eduardo Smith y otros 60 mil dólares en efectivo en el búnker de Orellana.

Las autoridades sospechan de Cárdenas por su inacción judicial frente al incumplimiento contractual de Juan Valencia (no le traspasó la propiedad de la tienda en Registros Públicos), pese a contar con un contrato de reconocimiento.

Sobre el octogenario Smith Rodríguez pesan serias acusaciones, según se aprecia en la investigación fiscal 25-2014, de la Segunda Fiscalía de Lavado de Activos (caso Orellana). Ello tras comprobarse su participación en laudos arbitrales para obtener la propiedad de tres inmuebles ubicados en San Isidro, San Juan de Miraflores y Chorrillos, cuya incautación ha solicitado la Fiscalía recientemente.

¿QUIÉN FUE JUAN VALENCIA ROSAS?
Juan Valencia Rosas fue condenado por actos de corrupción y considerado por la Comisión Waisman el principal testaferro de Montesinos. Aún viene siendo procesado por otros delitos por el desfalco a la Caja de Pensiones Militar Policial. Adeuda a la fecha 154 millones 250 mil soles por concepto de reparación civil.

El procurador Joel Segura expresó su extrañeza respecto a que tanto Valencia Rosas como Alberto Venero no hayan sido investigados por lavado de dinero.

Lo extraño de su caso es que los embargos ordenados en 2001 sobre dos inmuebles han sido levantados en 2015 a favor de su cónyuge Nelly Tovar. Este diario contactó a la abogada de Montesinos, pero no hubo respuesta.

DATOS

• Juan Valencia afirmó que no conocía a los personajes señalados: “Yo no tengo nada hace mucho tiempo. Me declararon insolvente. En la Procuraduría, en la Sunarp, y a través de Indecopi están rematando mis inmuebles”.

• Pedro Cárdenas se excusó de declarar para esta nota.

• Eduardo Smith contó que los hermanos Rodolfo y Ludith Orellana le ayudaron en algunos trámites y le dieron un dinero. Negó haber entregado cualquier tipo de autorización o poder notarial para cobrar cheques o realizar trámites en los registros públicos o centros de conciliación.

Por Carlos Neyra (carlos.neyra@peru21.com)