BERLÍN (EFE).– Una polémica medida viene siendo impulsada por el Gobierno alemán, el cual anunció que quiere crear las bases legales para poder expulsar del país a extremistas islámicos sin necesidad de que estos hayan incurrido en algún delito.
Así lo afirmó el ministro de Interior, Hans-Peter Friedrich, durante un congreso de su partido, la Unión Socialcristiana (CSU), en Múnich. En tal sentido, refirió que, en mayo, su portafolio presentará un proyecto de ley.
“Eso permitirá la expulsión de salafistas y predicadores del odio, al lado de extremistas que hayan cometido delitos concretos”, manifestó.
La policía alemana cree que las comunidades musulmanas radicales, como la de la mezquita de Hamburgo –vinculada a los atentados del 11 de setiembre en los Estados Unidos–, cuentan con cerca de 100 militantes entrenados para perpetrar ataques.
Si te interesó lo que acabas de leer, recuerda que puedes seguir nuestras últimas publicaciones por Facebook, Twitter y puedes suscribirte aquí a nuestro newsletter.