Guillermo Giacosa,Opina.21
ggiacosa@peru21.com
Siendo, en cambio, el comercio exterior el principal canal de contagio de “la debilidad de la economía mundial”. Pocas palabras pero, definitivamente, muy sabias y útiles al momento de formular las futuras políticas económicas. Significa que necesitamos imperiosamente fortalecer la integración regional ya que en la actualidad –aún desacelerados– atravesamos un periodo de crecimiento y bonanza que no se corresponde con lo que está ocurriendo en el llamado Primer Mundo. Crecimiento que nos permitiría, si comerciamos entre nosotros, disminuir los efectos de la crisis que azota a Europa y Estados Unidos y que, por el momento, está muy lejos de acercarse a una solución. El segundo punto, quizá el más importante a largo plazo, es el fortalecimiento de los mercados internos. Significa el mejoramiento de los niveles de vida de los ciudadanos a partir de una reconsideración de las remuneraciones que reciben actualmente por sus actividades y que en Perú, salvo en los estratos privilegiados, son regulares, bajas, muy bajas y de hambre. Un mayor poder adquisitivo de las mayorías estimularía el mercado interno y, si bien no reemplazará las inevitables bajas en las exportaciones, hará menos evidente y dramático este calvario al que estamos sometidos. Además, nos permitirá marchar hacia la ansiada inclusión social que, supongo, debe seguir siendo una de las metas del actual gobierno.
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