Después de los 40

En el portal Amazon hay diversos libros que podrían ser extraños para muchos. Veamos títulos traducidos. “Sexo después de los 40”, un clásico del sexólogo Saul Rosenthal. “Sexo después de los 40: estrategias para una satisfacción permanente”, de Marvel Williamson. “Sexo después de los cuarenta: ¡el mejor que tendrás!”, de Calvin Colarusso. “Una celebración del sexo después de los 50”, del doctor Douglas Rosenau. “Sexo después de los 50: Acelerando el romance, la pasión y la excitación (la mejor parte de la vida)”, de Ruth Westheimer. “Toda la noche: cómo hacer el amor con un hombre mayor de 50”, de la psicoterapeuta Barbara Keesling. Hay muchos más.

Lo cierto es que la existencia de estos libros responde al gran interés de las personas mayores de 40 y 50 años por vivir una sexualidad plena. Al parecer, como anticipan algunos libros, es una etapa en la que se puede tener una vida sexual intensa y placentera. Distinta, ciertamente, pero de ninguna manera aburrida o vacía.

Decíamos que libros así pueden sorprender a muchos. Hay quienes creen que el deseo sexual se desvanece a medida que pasan los años. Esta mirada puede ser cierta, pero no es tan sombría como parece. En efecto, las reglas de la naturaleza determinan que el ser humano envejezca y que, por tanto, diversas funciones ya no trabajen con la misma intensidad de antes. La pregunta es: ¿hay que dejarse vencer por el peso del tiempo?

“Cumplir 50 puede ser uno de las más poderosos y positivos pasos en la vida sexual del hombre”, señala la experta Barbara Keesling. Si la sexualidad del hombre a los 20 o 30 años es una celebración de la cantidad, a partir de los 40 o 50 es un festejo de la calidad. Hay más paciencia y una mirada hacia el compañerismo y a la búsqueda de la satisfacción de la pareja. Además, la aparición del Viagra y otros medicamentos contra la disfunción eréctil han cambiado la vida de miles de varones. “A uno le cuesta admitir que toma ‘pastillitas azules’, pero, siendo honestos, es una gran cosa”, señala Juan José (55).

Igual ocurre con las mujeres. Cumplir 40 ya no es sinónimo de “abandonar las canchas”. Al contrario, muchas sienten que pueden tener una sexualidad más divertida y placentera que a los 20 años. “El sexo es distinto y mejor. Ya no tienes tanta energía y resistencia como antes, pero tu actitud es otra: tienes menos complejos y sabes lo que quieres”, cuenta Ana María (52). “No es solo el hecho que dejes de reglar y que no te preocupes por quedar embarazada. Sucede que algo ocurre dentro de nosotras que nos hace sentir así. Claro, siempre y cuando tengamos la voluntad y el interés”, asegura Leonor (49).

En resumen, hablar de una sexualidad otoñal no es precisamente el término correcto. Al parecer, es una nueva primavera.

TENGA EN CUENTA

- La doctora Ruth Westheimer pide no olvidar que el cerebro es el principal órgano sexual. Disfrutar la sexualidad radica en usar la inteligencia para acomodarse a los nuevos escenarios de la vida.

- ¿Y las enfermedades crónicas? Pueden ser grandes obstáculos para tener una vida íntima. Sin embargo, la asesoría profesional resulta de gran ayuda.