Modelo en silla de ruedas le muestra al mundo que los sueños sí se cumplen

Si a veces piensas que los sueños y las metas nunca se cumplan, quizás debes conocer a Alexandra Kutas, una modelo de 23 años que no puede caminar desde que nació. En silla de ruedas, esta mujer desfiló en la reciente Fashion Week de Kiev.

Para ella, es un sueño cumplido y una victoria para las personas con alguna discapacidad en Ucrania, su país natal.

En un trono de madera portado por cuatro hombres, Kutas, con un vestido negro largo, Alexandra saludó al público. Es la primera vez que ocurre algo así en Ucrania.

“Quería desfilar para demostrar que una chica en silla de ruedas puede ser vista como una profesional de primera categoría”, le declaró a la AFP.

La batalla

La joven siempre soñó con ser modelo. Durante años envió cartas a las agencias, y las respuestas llegaban. Eran misivas escritas con corrección y cuidado donde le decían no.

“Me dijeron que era muy guapa pero que no sabían cómo podrían representarme porque el mercado todavía no era maduro para eso”, cuenta.

Kutas tuvo una lesión en la médula espinal provocada por un error médico. Estudió en una escuela normal. Como el centro no tenía escaleras mecánicas ni rampas, su padre y su abuelo la subían.

“Sí, fue difícil, en nuestro país todo es más difícil para una persona con movilidad física limitada y todo el mundo lo sabe”, reflexiona.

Nada la venció

En 2012 estaba almorzando cuando un fotógrafo se acercó a ella y le preguntó si quería ser modelo. Ella aceptó y la experiencia le gustó. Pero, en el fondo, sentía que quizás sería marginada.

Un día vio un desfile del británico Alexander McQueen, quien en 1999 eligió como modelo a Aimee Mullins, una atleta paralímpica amputada de las dos piernas. “Fue una gran motivación, una gran inspiración para mí. Me pregunté por qué si fue posible en 1999 no podría serlo hoy para una chica en silla de ruedas”, declara.

Más tarde, al enterarse de que un grupo de jóvenes diseñadores italianos, FTL MODA, invitó a modelos con discapacidades a participar en la Fashion Week de Nueva York, entendió que el mundo estaba preparado para un cambio. Y nada la detuvo.

Un ejemplo

El diseñador ucraniano Fiodor Vozianov formaba parte de los escépticos. No se imaginaba que el universo de la moda en su país estuviera un día preparado para aceptar modelos alejadas de los cánones de belleza típicos.

Pero la presencia de Alexandra Kutas le cambió la perspectiva. Lo impulso. “Las personas no son todas iguales, somos distintos” y “sería extraño prohibir en los podios a una parte de nuestro mundo”.

Hoy, Alexandra Kutas es una modelo en alza en Ucrania, un país donde personas como ella han sufrido discriminación y, durante la época soviética, llegaron a tener que vivir ocultos.

La joven también es consejera del alcalde de su ciudad natal, Dnipro, cerca de la zona rebelde prorrusa del este de Ucrania.

Su tarea consiste en facilitar las condiciones de vida a las personas con discapacidad, algo esencial por la guerra entre los rebeldes y el ejército ucraniano, que causó más de 10.000 muertos y 23.000 heridos, muchos de ellos amputados.