El huracán ‘Sandy’ azotó esta noche las Bahamas con vientos violentos y torrenciales lluvias, tras azotar el Caribe, donde dejó al menos 21 muertes y varias propiedades destruidas.
En Cuba, el fenómeno mató a 11 personas, entre ellos un niño de cuatro meses, en las provincias orientales de Santiago de Cuba y Guantánamo, donde derribó casas, árboles y arrancó techos, informó la prensa oficial.
Algunas de estas muertes se dieron por graves contusiones cráneoencefálicas o torácicas provocadas por derrumbes de viviendas y en otros casos se están investigando, indicó el Estado Mayor Nacional de la Defensa Civil de dicho país.
“Nunca pensé ver un huracán de esta magnitud. Pensábamos que se acababa el mundo”, dijo una habitante de la localidad santiaguera de Palma Soriano a la emisora Radio Rebelde.
De otro lado, nueve personas fallecieron en Haití y una en Jamaica.
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