22.NOV Viernes, 2024
Lima
Última actualización 08:39 pm
Clasificados
Opinión

Tenemos un objetivo de política económica: que la variable Y tome tales valores. El Estado controla o puede controlar la variable X, que afecta a Y. Por infortunio, no controla la variable W, que también afecta a Y. Sabemos –por la investigación económica– cómo afectan X y W a Y. Ya es más fácil: Calculamos X, dado W, para llegar al Y que queremos.

Élmer Cuba,Al.Mercado
@elmercuba en Twitter

Eso se llama política económica basada en teoría y en evidencia empírica. Supongamos ahora que no necesariamente estamos de acuerdo en los objetivos (o no hemos discutido mucho el tema). O que estando de acuerdo en Y, no sabemos cómo X y W afectan a Y. Solo sabemos que controlamos S, una variable menor que afecta marginalmente a Y. Como somos hombres prácticos, de acción, nos comprometemos a ejecutar S. No hay nada más práctico que un buen diagnóstico. Pero no basta. Una mala ejecución (X), lleva también inevitablemente al fracaso. Mientras tanto, sigamos con S y no pasará mucho.


Si te interesó lo que acabas de leer, recuerda que puedes seguir nuestras últimas publicaciones por Facebook, Twitter y puedes suscribirte aquí a nuestro newsletter.