Andrés Mendoza: A 10 años del gol que falló ante Ecuador

Andrés ‘El Condor’ Mendoza es sinónimo de error en el Perú. Corría el año 2005 cuando su nombre quedó inmortalizado para usarlo cada vez que alguien falla un gol frente al arco en la pichanga del barrio, cada vez que alguien sonríe tras perderse la victoria.

[El reencuentro del ‘Cuto’ Guadalupe y el ‘Cóndor’ Mendoza]

Son 10 años ya desde que el fútbol nos castigó con ese episodio. El 25 de marzo de 2005, la selección peruana empataba 2-2 con Ecuador. El mejor ‘Chorri’ de esa década recogió un balón desde medio campo para iniciar los 10 segundos mágicos de la blanquirroja. Con el minuto 88 iniciado, recorrió unos metros para acomodarse y lanzar un centro de aquellos al área ecuatoriana.

Allí todo funcionó para Perú. El centro se elevó por los cuatro defensas ecuatorianos. Por detrás, como un verdadero cóndor que va en busca de su presa, Mendoza comenzó a correr en busca del balón. Nadie lo vio, nadie lo detuvo. La pelota, que ya parecía pintada de rojo y blanco, al caer dio un pique antojadizo y como un imán se pegó al pecho de Andrés Mendoza que de un pequeño golpe la llevó a su derecha para dar inicio a su leyenda.

Edwin Villafuerte, portero ecuatoriano, en su desesperación por parar al ‘Cóndor’ terminó atropellando a su defensa Ulises de la Cruz. Los dos tirados en el piso fueron los privilegiados en ver cómo millones de gritos peruanos se ahogaron en tan solo un instante.

Si los 10 segundos anteriores fueron mágicos para Perú, el número once fue el inicio de una pesadilla.

Tras caer del pecho de Andrés Mendoza, el balón dio un pequeño bote para acomodarse aún más en favor del delantero peruano. En la tribuna norte los hinchas peruanos comenzaron a gritar eso que nunca iba a suceder. Con el balón suspendido en el aire, el ‘Cóndor’ pensó que su izquierda era la mejor opción para finalizar la jugada –confirmando eso que repiten los delanteros: que en el área no se debe pensar– y la alzó con el fin de acabar de una buena vez la acción, el partido.

Como si se tratara de una de esas piruetas acostumbradas de Ronaldinho, su pierna izquierda le dio una vuelta entera al balón –que quien sabe si tampoco creía lo que sucedía– y nunca hubo gol.

“Ataque Mendoza, Mendoza, liquide Mendoza, es el gol Mendoza, ataque Mendoza, busque el tanto Mendoza. Increíble, no lo puedo entender. Sufrimos todos”, relató un desesperado, ¡y siempre educado!, ‘Toño’ Vargas, en la grabación más popular que queda de la fatídica escena.

Lo que sucedió después quedó resumido en una sola imagen: la sonrisa del ‘Cóndor’ tras fallar el tanto con el fondo de Claudio Pizarro agarrándose la cabeza. Si bien se trató de una risa de nervios, consciente del desacierto, nunca pasaría desapercibida para el hincha peruano. Mendoza jamás necesito otro apodo, su nombre y apellido se convirtieron en sinónimos de error.

¿QUÉ HUBIESE PASADO SI METÍA EL GOL?
La respuesta es incierta. Perú estaba en los últimos puestos de la Eliminatoria a Alemania 2006 y dos puntos más no hubiese ayudado mucho si es que tenemos en cuenta que en el siguiente partido la bicolor cayó 5-0 frente a Colombia, en el debut de Freddy Ternero tras la salida de Paulo Autori.

Quién sabe que si de meterla, Mendoza hubiese evitado el maltrato injusto de la hinchada y la prensa. ¿De repente se convertiría en la antesala perfecta del tanto que Fano marcaría seis años después ante Argentina? De lo que sí estamos seguros es que de haberlo convertido, su gol habría permitido mejorar un poco la autoestima deportiva de este país acostumbrado a la palabra hubiese.

Por: Pablo Vilcachagua Cancino (pablo.vilcachagua@peru21.com)