Un profesor del colegio Ricardo Palma, en Ate Vitarte, golpeó brutalmente a un alumno del segundo año de secundaria y casi le hace perder la vista.
Lo peor de todo es que el docente Hernán Ramírez Fuertes luego prometió ayudarlo con sus notas si el menor de 14 años no daba a conocer la agresión.
“Por hacer bulla nomás me tiró un lapo y con fuerza me botó a la pared. Me llevó al hospital, me dijo ‘no digas nada y te voy a ayudar en las notas‘”, contó el adolescente Denilson, quien terminó con lesiones en el ojo izquierdo.
Como prueba del maltrato, un compañero del muchacho grabó la conversación entre el docente y el agraviado, minutos después de la golpiza.
“A cualquier persona se le puede pasar la mano, uno no es perfecto. Sin embargo, él hace mucho tiempo estaba molestándome. Voy a conversar con él y por favor no estén hablando del caso”, se le oye decir a Ramírez, quien es promotor de un colegio que tiene como sede su propia casa.
Otros alumnos también acusaron al profesor de maltratarlos. “Nos falta el respeto, nos pone apodo. A mí puso el apodo de Toledo, hijo de Toledo. Me tiró el puntero de policía escolar en la cabeza y se rompió”, comentó otro escolar.
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