Fritz Du Bois,La opinión del director
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Ese es el caso de la primera dama y su reiterada aunque ambigua negativa a tener en agenda la intención de ser candidata. En realidad sus esfuerzos por negarlo han fracasado, ya que 3 de cada 4 peruanos están convencidos de que Nadine Heredia quiere suceder en el puesto a nuestro actual mandatario.
Pese a ello la población no la está rechazando, al contrario, sale empatada con Keiko Fujimori en la intención de voto de los encuestados. Así que es una persona con un evidente potencial y futuro político el cual bien podría desperdiciar si continúa en esta aventura conyugal por tratar de aferrarse al cargo.
Por otro lado es inaceptable la escandalosa utilización que están llevando a cabo del dinero de los peruanos en ir armando una campaña presidencial que empezó el mismo día que su esposo asumió el mando. Sin duda no hay justificación alguna para enviar un equipo del canal estatal a Madrid y a Río para transmitir asuntos que no son prioritarios, con el único objetivo de proyectar la imagen de la primera dama ante el electorado.
Más aun su campaña está adquiriendo una creciente intensidad pese a que la elección por todavia está a tres largos años. A este paso va a terminar pareciéndose a Maduro el candidato venezolano desesperado por mantenerse en el poder, atropellando a la oposición, utilizando abiertamente el aparato del estado y manipulando el proceso electoral con una cedula que contiene 14 fotografías suyas frente a solo 1 de su adversario. Ojalá pese a todos los abusos y obstáculos, el domingo en Venezuela el chavismo sea enterrado.
En todo caso nuestra pareja presidencial debería reflexionar y dedicarse a gobernar en lugar de seguir obsesionados por lograr el entornillamiento.
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