Google ha reemplazado a los mejores amigos y a los doctores (esto es muy peligroso, por cierto. Pero en lo que compete al sexo, muchas personas acuden al buscador para resolver sus dudas.
El rejuvenecimiento vaginal es un método que suele ser objeto de malentendidos. Algunas personas creen que es una intervención de corte exclusivamente estético, frívolo e, incluso, excéntrico.Sin embargo, la utilidad principal de esta intervención es funcional.
Personal de INPE intervino a una mujer, identificada como Mercedes Haydee Reyes Risco (48), cuando pretendía ingresar al penal de Carquin de Huacho con 358 gramos de marihuana que llevaba en su vagina.
SONÁMBULOS CON GANAS La sexomnia es un trastorno muy extraño. Afecta a menos del 1% de la población y consiste en lo siguiente: la persona es capaz de tener relaciones sexuales mientras duerme. Un sonámbulo calentón, en otras palabras. Aquel que sufre esta inusual y terrible condición no es capaz de recordar lo que hizo. Según la revista Sleep, este trastorno del sueño suele afectar más a hombres que a mujeres.
SONÁMBULOS CON GANAS La sexomnia es un trastorno muy extraño. Afecta a menos del 1% de la población y consiste en lo siguiente: la persona es capaz de tener relaciones sexuales mientras duerme. Un sonámbulo calentón, en otras palabras. Aquel que sufre esta inusual y terrible condición no es capaz de recordar lo que hizo. Según la revista Sleep, este trastorno del sueño suele afectar más a hombres que a mujeres.
La comunicación es clave en la sexualidad. Se puede tener relaciones sin establecer un diálogo, cierto, pero si hablamos de una pareja que se quiere y desea invertir en la calidad de sus encuentros amorosos, entonces hay que prestarle mucha atención al lenguaje. Las palabras, herramientas de seducción por sí mismas, pueden ser también armas de destrucción erótica. Es decir, pueden aniquilar por completo el momento erótico. Ilustremos este punto.
La comunicación es clave en la sexualidad. Se puede tener relaciones sin establecer un diálogo, cierto, pero si hablamos de una pareja que se quiere y desea invertir en la calidad de sus encuentros amorosos, entonces hay que prestarle mucha atención al lenguaje. Las palabras, herramientas de seducción por sí mismas, pueden ser también armas de destrucción erótica. Es decir, pueden aniquilar por completo el momento erótico. Ilustremos este punto.
El sexo va más allá de lo genital. Es por ello que, para garantizar el máximo placer, hay que saber usar todo el cuerpo. Por ejemplo, las piernas son un buen recurso para ajustar la profundidad de la penetración. Analicemos dos poses para ilustrar este punto. Primero: el misionero.
A diferencia del hombre, la mujer necesita buen tiempo para desarrollar la fase de excitación plena. Este proceso, alimentado por besos, caricias y otros estímulos sensoriales, puede durar cinco, diez, quince, veinte minutos o más (depende de cada dama). Por otra parte, investigaciones científicas sostienen que la mujer necesita sentirse cómoda, segura y relajada para poder disfrutar plenamente una relación sexual. Lo paradójico es que muchos caballeros ignoran todo esto: ni dedican tiempo a la fase de excitación de su compañera ni son capaces de brindarle la seguridad necesaria. Aceptar y entender estas condiciones puede cambiar totalmente el escenario sobre la cama. ¿Qué otras necesita saber el hombre?
A diferencia del hombre, la mujer necesita buen tiempo para desarrollar la fase de excitación plena. Este proceso, alimentado por besos, caricias y otros estímulos sensoriales, puede durar cinco, diez, quince, veinte minutos o más (depende de cada dama). Por otra parte, investigaciones científicas sostienen que la mujer necesita sentirse cómoda, segura y relajada para poder disfrutar plenamente una relación sexual. Lo paradójico es que muchos caballeros ignoran todo esto: ni dedican tiempo a la fase de excitación de su compañera ni son capaces de brindarle la seguridad necesaria. Aceptar y entender estas condiciones puede cambiar totalmente el escenario sobre la cama. ¿Qué otras necesita saber el hombre?
“Tengo que decir que los mejores orgasmos que he tenido me han llegado soñando. En mi cama”. Ximena Córdoba, actriz colombiana.
“Tengo que decir que los mejores orgasmos que he tenido me han llegado soñando. En mi cama”. Ximena Córdoba, actriz colombiana. “Puedes mentir a tus familiares en la cena de Navidad y decirles que todo está muy bien. Pero no puedes mentirle a tu vagina”. Olivia Wilde, actriz.
En el siglo II d.C., una secta planteó que la vida tenía que vivirse calato. Los partidarios de este culto solían llamarse adamitas, y estaban convencidos de lo urgente que era estar sin ropa, tal como Adán y Eva en el Edén. Si bien la secta desapareció, en los últimos dos milenios se han producido intentos para reivindicarla.
En el siglo II d.C., una secta planteó que la vida tenía que vivirse calato. Los partidarios de este culto solían llamarse adamitas, y estaban convencidos de lo urgente que era estar sin ropa, tal como Adán y Eva en el Edén. Si bien la secta desapareció, en los últimos dos milenios se han producido intentos para reivindicarla. En tal sentido, ¿son los atrevidos visitantes del balneario nudista de Caleta Colorada (Chimbote) seguidores modernos de esta doctrina? En fin. Repasemos otras curiosidades sexuales.
WASHINGTON (AFP).– El ginecólogo estadounidense Adam Ostrzenski afirma haber encontrado el punto G, el centro de extremo placer femenino, ubicado en la pared interior frontal de la vagina, cuya existencia sigue siendo objeto de controversia durante años. Ostrzenski, del Instituto de Ginecología de St. Petersburg, Florida (sureste), dijo que ha confirmado la existencia del punto G tras realizar una disección de la pared interior de la vagina del cadáver de una mujer de 83 años, indicó un estudio publicado en la revista Journal of Sexual Medicine.
Un ginecólogo estadounidense afirma haber encontrado el Punto G, el supuesto centro de extremo placer femenino ubicado en la pared interior frontal de la vagina, cuya existencia en la anatomía sexual de la mujer es objeto de controversia desde hace décadas.