Son las reinas del agua, de las que emergen a tierra firme para subirse al podio de la gloria. Son quienes dominan el líquido elemento para convertirlo en oro y lucirlo en el cuello. Son las hermanas Delfina y Natalia Cuglievan, quienes empezaron a darnos preseas doradas en los Juegos Bolivarianos que nuestro país organiza y donde vamos por lo más alto.